Es común escuchar y percibir que buena parte de los espacios públicos del país están subutilizados, que reciben una cantidad de visitantes menor a la que se esperaba cuando fueron diseñados y que un número importante de ciudadanos opta por acudir a espacios privados donde se sientan más protegidos.

“No creo que sea nada mas la inseguridad la razón por la que la gente ha dejado de ir a estas plazas”, dice María Alejandra Vera, creadora y presidenta de la Fundación Cine Jardín, una organización sin fines de lucro que desde mediados de 2013 ha procurado brindar opciones para el esparcimiento de personas de distintas edades, fundamentalmente en espacios al aire libre.

Se trata de un emprendimiento social, que nació de lo que ella describe como un hobby personal y de su necesidad como ciudadana de hacer un mayor aporte al país y a la comunidad.

“No me bastó votar, sentí que votar no es suficiente en este momento de Venezuela. Y que (aunque) trabajar de lunes a viernes, donde sea que la gente trabaje, y trabaje bien y pagando impuestos y haciendo todo bien, como debe ser, no es suficiente en este momento. Que hay que hacer algo más, que hay que dar un paso más, que hay que colaborar, que hay que ser voluntarios que hay que involucrarse más”, dice Vera al referirse a lo que la llevó a crear este fundación a la que dedica en este momento el 100% de su tiempo.

Esta emprendedora consideró que hacían falta mayores opciones para que las personas pudieran compartir, sobre todo en la zona oeste de Caracas, y fue así como de asistir a actividades culturales organizadas por  distintas instituciones y personas, pasó a ser una promotora de este tipo de actividades, creando esta fundación que en este momento ofrece proyecciones de películas al aire libre, reuniones de lectores con escritores venezolanos y un club de corredores que se reúne y recorre las calles de urbanizaciones del suroeste de la capital.

“Nació como una necesidad de construir y de ofrecer al país otra opción más para integrar a la gente, a la comunidad a participar en actividades, y de alguna manera crear ese sentido de pertenencia sobre la ciudad”, sostiene la Fundadora de Cine Jardín.

Los tres proyectos a los que se dedica esta fundación se denominan “Cine Jardín”, “Pasa la Hoja”,  y Runners Oeste. Nacieron de manera simultánea y mantienen una programación periódica y gratuita para quienes quieran asistir y participar.

La primera de estas iniciativas es la más conocida. Se trata de la proyección de películas en espacios al aire libre, a los que las personas asisten llevando su silla o manta, y si lo desean un refrigerio para tomarlo al estilo picnic, mientras disfrutan de las cintas.

FotoCineJardinmantas

Desde junio de 2013 ha presentado películas en espacios como la Universidad Simón Bolívar y en parques de la Urbanización Montalban.  Además, de manera permanente realiza proyecciones dos domingos al mes en la Hacienda la Vega. Un número importante de estas películas son facilitadas por embajadas y forman parte de ciclos de cine de diversos países que se presentan en Venezuela.

Pasa la Hoja, es un club en el que los lectores se reúnen con escritores venezolanos para conversar sobre algunas de sus obras. Ya ha desarrollado 14 encuentros de este tipo con 14 escritores diferentes. Una vez al año, también realiza un festival de lectura que se extiende durante todo un día e incluye cuenta cuentos, encuentro con escritores, donación e intercambio de libros escolares y de literatura variada y promociones de distintas editoriales.

Runners Oeste también es un club, pero de corredores. Busca incentivar a ciudadanos del oeste y suroeste de Caracas a entrenarse en grupos en calles y espacios de esta parte de la ciudad capital.

El patrocinio, la colaboración de instituciones y personas, y las donaciones esporádicas son en este momento las fuentes de recursos para el desarrollo y mantenimiento de estas iniciativas.

“A diferencia de los emprendimientos de negocio, como el objetivo y el fin es llevar a cabo la actividad , el dinero termina siendo un medio que efectivamente buscamos y efectivamente conseguimos. Cualquiera de los tres proyectos puede manejar patrocinios y anunciantes, cualquiera de los tres proyectos puede ofrecer productos tipo material POP. También cualquiera de las tres iniciativas puede trabajar como un proyecto de responsabilidad social porque estamos mejorando, afectando directamente a una comunidad”, sostiene María Alejandra Vera al argumentar que se trata de un emprendimiento social sin fines de lucro, pero que amerita recursos para su sostenibilidad.

Esta fundación resultó finalista del concurso Venezuela sin Límites y obtuvo un reconocimiento como ONG del año por la Asociación Civil Caracas Posible. A corto plazo se plantea trabajar con nuevos patrocinantes, y reforzar su equipo de trabajo.

Hasta ahora la única persona que labora a tiempo completo es su fundadora y cuenta con un grupo de personas que colaboran en las distintas actividades.

La programación de cada una de las iniciativas de la fundación Cine Jardín es difundida a través del sitio en internet: www.cinejardin.com y a través de redes sociales como Twitter: @Cinejardin y Facebook: CineJardin.

Fotos: Fundación Cine Jardín

Actualidad Laboral/JM