“En la medida en que se utilice parte de este Decreto (de Emergencia) que dice que van a tomar activos del sector privado para poder ser utilizados por el Ejecutivo, en esa misma medida podemos ver que los problema de los venezolanos se van a agravar”. Así se expresó el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Juan Pablo Olalquiaga, a propósito de la decisión del Tribunal Supremo de Justicia sobre la validez de los poderes especiales al Presidente Nicolás Maduro.
El dirigente empresarial reiteró que el texto parte de los antecedentes equivocados, y las propuestas para salir de la crisis están “en sentido contrario” a las medidas que requiere la economía venezolana. Recordó que el país “se ha venido desindustrializando” desde 2004, con cierre de empresas, y caída en el nivel de producción. Dijo que “el Decreto es terriblemente peligroso”.
Con una “aguda preocupación” insistió en las propuestas que ha hecho el sector industrial para la recuperación del aparato productivo del país, como pagar la deuda con los proveedores internacionales, que se mantiene en 12 mil millones de dólares; legalizar un mercado paralelo que permita la importación de materia prima e insumos que no se fabriquen en Venezuela; sinceración de los costos reales y pasar las empresas expropiadas al privado.
Pero hasta ahora el Ejecutivo no ha atendido estos planteamientos “hemos recibido bofetadas, se nos ha tildado de ladrones, de traidores. Aquí hay empresas importantes que, aún teniendo líneas de productos que pierden plata con cada kilo que van sacando, han continuado reinvirtiendo; yo me pregunto ¿cuál es la traición?”, dijo.
