La atracción del talento que la organización necesita para el desarrollo de su plan de negocio se ha posicionado como una prioridad que algunas compañías que, incluso, la sitúan por delante de su propia transformación digital, que es otra de las necesidades que manifiestan tener hoy día. Esto es así debido a que es el capital humano el responsable de dar forma a los proyectos que los líderes empresariales deciden poner en marcha, aun cuando la automatización amenaza con cambiarlo todo.


No obstante, los profesionales deberán adaptar su formación a los nuevos tiempos, a la vez que incorporan habilidades que hasta ahora habían permanecido en un segundo plano, como es el trabajo en equipo tanto de forma presencial como online, la generación de nuevas ideas y la creatividad o la visión estratégica para el desarrollo de procesos o aplicada en el análisis de datos, entre otras.


Las organizaciones deben brindar el apoyo necesario para que los trabajadores puedan formarse, desarrollar sus talentos y avanzar en sus carreras de una forma transversal y no lineal, tal y como dictan las nuevas tendencias de trabajo.


Los expertos de Up SPAIN, empresa especializada en la gestión de beneficios sociales, destaca tres ventajas que las organizaciones obtienen a la hora de poner en marcha acciones que permitan desarrollar el talento de sus profesionales o para cuidar su bienestar y satisfacción laboral.


Invertir en el capital humano es hacerlo en la estrategia empresarial


Cada vez más son las voces expertas que hablan de los beneficios que trae consigo contar con una imagen de marca empleadora potente ya que, según los estudios, invertir en ella permite elevar la intención de compra de los potenciales clientes, de la misma manera que la hace descender el hecho de que el talento perciba que la organización no apuesta y cuida a sus empleados desde una perspectiva global: física, mental, emocional y profesional.


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Cuidar el capital humano permite fomentar su motivación y creatividad


Un empleado feliz es un empleado satisfecho, comprometido, motivado y capaz de generar nuevas ideas que hagan que el negocio despunte en su sector. Así lo concluyen algunas investigaciones que correlacionan la felicidad laboral con una mayor satisfacción y productividad laboral.


En este sentido, desde Up SPAIN aconsejan invertir en el bienestar de los profesionales, poniendo en marcha medidas como planes de beneficios que den respuesta a sus necesidades y preocupaciones más inmediatas, como lo es la obtención de una mayor posibilidad para conciliar tiempo en familia y trabajo, contar con una mayor flexibilidad laboral o contar con medidas que fomenten la práctica deportiva o el disfrute fuera de la jornada laboral.


Invertir en beneficios sociales limita la fuga de talento y la pérdida económica que ello conlleva


Por otro lado, el retorno de la inversión que genera apostar por la satisfacción laboral de los empleados tiene una repercusión económica directa, la cual se vincula al gasto que supone para una empresa reemplazar a un empleado que decide marcharse de la organización. Un gasto que, además, de económico también implica una pérdida de tiempo y de agilidad operativa que puede hacer que la eficiencia descienda, al tiempo que el estrés laboral aumenta, pues mientras la compañía busca al candidato más adecuado, el resto de profesionales deben asumir la carga de trabajo extra.


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