Las leyendas y los mitos siempre han alimentado el imaginario colectivo. Es más atractivo pensar que los héroes llegan a la cima tras vivir historias llenas de esfuerzo, superación y, si es posible, con algún que otro enredo, que con experiencias simplonas y carentes de atractivo.

Esto ocurre con momentos históricos, con personajes públicos y personalidades y, como no, con las startups que hoy son mastodontes tecnológicos. Es mucho más interesante, casi romántico, pensar que Apple nació en las entrañas de un garaje y sin apenas medios que a base de llamadas comerciales desde una triste habitación (algo que el propio cofundaor de la compañía, Steve Wozniak, ha confesado).

Como ella, no es la única gran empresa tecnológica cuyos orígenes han sido ligeramente maquillados para aumentar más si cabe su leyenda. Youtube, Google o Facebook son sólo algunos ejemplo.

A veces no se sabe muy bien quién inventa estos mitos: contribuyen a ello los fans de estas compañías, otras veces el cine, cuando traslada sus historias a la gran pantalla, y otras tantas el público en general. Aquí encontrarás cinco empresas que hoy mueven millones de dólares y cuyo origen, un poco entro todos, nos hemos encargado de mitificar:

Facebook: plagio, traición y avaricia

Las dimensiones de Facebook y la forma en que ha cambiado las comunicaciones interpersonales deberían bastar para construir su leyenda. Pero ni si quiera la reina de las redes sociales se libra de la rumorología y los mitos.

La adaptación al cine de sus orígenes (basada en parte en rumores) nos muestra a un Zuckerberg resentido que, nada más romper con su novia, decide desahogarse creando una plataforma para puntuar a las chicas del campus de Harvard donde estudiaba, accediendo a los servidores y violando los sistema de seguridad. A partir de aquí comienza una historia en la que no faltan conflictos legales por plagio, del que le acusaron dos compañeros de universidad, los gemelos Winklevoss, ni amistades rotas y avaricia.

Tinder: relaciones tóxicas

Tinder tiene un recorrido no exento de polémica. Nació en una incubadora de Los Ángeles en 2012 de la mano de cuatro veinteañeros, Sean Rad, Justin Mateen, Chris Gulzcynski y Whitney Wolfe. Los dos primeros llevaban tiempo trabajando en otros proyectos, pero pronto pusieron todos sus esfuerzos en crear una aplicación para ligar visitando los perfiles de Facebook de los solteros de la zona.

Durante esta fase Rad y Wolfe empezaron a salir, pero la relación acabó terminándose en términos poco amistosos, llegando la fundadora a demandarle por acoso sexual. Poco después sería entrevistada por Bloomberg, donde se despachó a gusto, asegurando que Tinder ni si quiera era una startup, sino una empresa que les permitía pagar el alquiler de la incubadora, cuyos dueños eran los verdaderos dueños de la compañía.

Youtube: una cena que lo cambió todo

Cuenta la leyenda que dos de los fundadores de Youtube, Steve Chen y Chad Hurley, decidieron grabar con su cámara una fiesta con amigos. Corría el año 2005. Aquella noche fue memorable, y pensaron que todos querrían tener un recuerdo en vídeo. Cuando quisieron mandarlo por correo, fue imposible porque pesaba demasiado. De su frustración surgió la idea: crear un sitio online donde cualquiera pudiera enviar y reproducir cualquier vídeo.

Lamentablemente, los propios fundadores lo han desmentido, asegurando que dicha fiesta nunca tuvo lugar. Se conocieron en Paypal, de la que eran empleados, aunque nunca han esclarecido cómo se les ocurrió la idea de una plataforma de vídeo.

eBay: una historia muy dulce

La compañía de subastas eBay fue fundada en 1995 por Pierre Omydiar en San Jose, California. Según la historia más conocida, se le ocurrió la idea de crear un portal de subastas tras ver lo frustrada que se sentía su novia al no poder completar su colección de figuras que acompañaban a los caramelos PEZ.

Un origen romántico y dulce que en realidad, tal y como confirmaría después uno de sus primeros empleados, no fue tal. eBay nació como suelen hacerlo la mayoría de empresas: por los deseos de un joven de hacerse millonario. Pero esto resulta mucho más frívolo y menos atractivo.

Google: el eterno garaje

Una vez más nos encontramos con un garaje como escenario donde surge la magia. El mito difundido es que el buscador de buscadores salió de las mentes de Larry Page y Sergey Brin trabajando en uno de ellos en 1998.

Aunque no es del todo falso, ya que ambos fundadores alquilaron un garaje en Menlo Park, pero cuando Google llevaba un par de años funcionando y ya contaba con un millón de dólares de capital inicial. Llegaron a un acuerdo con el propietario, Susan Wojcicki, que necesitaba un dinero extra para pagar la hipoteca. Después le contratarían en Google y ahora es CEO de Youtube.

Actualidad Laboral / Con información de Ticbeat