¿Sientes que no tienes suficientes horas en la oficina para hacer todo? Tal vez es hora de cambiar tu rutina previa al trabajo. La forma en que comienzas la mañana puede hacer la diferencia, durante el resto del día.

"Si comienzas con caos, así será el resto del día, pero no basta comenzar por la mañana, debe comenzar antes de eso", dice Peggy Duncan, experta en productividad personal. Expertos en productividad y lugares de trabajo dijeron que, dormir bien es el primer paso para rendir al máximo y tener los niveles de energía suficientes, para ser más productivos.

1- Establece prioridades

Es hora de acabar con esa interminable lista de cosas por hacer que se ha estado planeando en tu cabeza, en papel o una aplicación. Comienza cada mañana anotando todo lo que deseas lograr ese día. A continuación, dales prioridad de la siguiente manera: críticos (se deben realizar en las próximas 24 horas), importantes (para hacerse en los próximos días) o de baja prioridad (tareas que no son tan sensibles al tiempo). "Esto significa que tendrás que centrarte en las cosas más importantes", dice la experta en productividad, Ellen Faye.

Una vez que tengas una lista de tus obligaciones, programa tu día de la manera más eficiente posible. "Organiza tu calendario con actividades similares para que tu día fluya mejor", recomienda Kathryn McKinnon, especialista en administración del tiempo. Eso significa hacer todas tus llamadas telefónicas a una hora establecida, y responder a los correos electrónicos en fragmentos.

Para que tu equipo sea más productivo, una reunión diaria puede ayudar a que todos estén en la misma sintonía con las prioridades del día, pero háganlo breve. "Tómense de 5 a 10 minutos para una reunión diaria por la mañana. Todo el mundo tiene una idea de los eventos críticos y urgentes del día", sugiere Faye.

2- Elimina las decisiones y tareas mundanas

Agilizar tus mañanas puede ayudar a reducir la frenética carrera por toda la casa, para salir a tiempo. Elige tu ropa, prepara tu desayuno, tu almuerzo, y organiza todas tus cosas de trabajo la noche anterior.

Si preparar tu ropa todas las noches te parece excesivo, hay otras maneras de hacer que tu rutina matutina sea más eficiente. Por ejemplo, a Faye le gusta escoger su atuendo cada mañana, pero su cajón de calcetines está lleno de solo un tipo en específico. "No tengo que pensar en eso. Tengo 10 pares iguales de calcetines. Todos coinciden y no pierdo el tiempo".

3- Ten tiempo de trabajo pre-oficina

Leer el correo electrónico mientras te cepillas los dientes y verificar que tus hijos se estén vistiendo, es una realidad para muchas personas, pero no es eficiente. Si tienes que responder correos electrónicos y llamadas telefónicas, relacionadas con el trabajo, antes de llegar a la oficina; designa un periodo de tiempo para sentarte a hacer exactamente eso. "Si sabes que tu cliente o empresa necesita que estés respondiendo correos electrónicos, programa una media, una hora o lo que sea que necesites para cuidar tu tiempo. No intentes apretarlo. Incorpóralo en tu rutina", aconseja Faye.

4- Tómate tiempo para ti

Tómate un tiempo para concentrarte en ti mismo. Ya sea que estés trabajando, meditando, escribiendo un diario o escuchando música relajante, haz algo solo por ti, aconsejan expertos. "Date ese espacio antes de ir a trabajar. De esa forma, no te sentirás resentido o enojado; te sentirás como si te hubieras hecho un tiempo y te sintieras bien. Necesitas ese tiempo para reorganizarte y mantener tu energía", dice McKinnon.

Comer un desayuno balanceado también ayuda a establecer un tono productivo cada mañana, agrega. "Somos mucho más productivos cuando comenzamos con un desayuno nutritivo. Las proteínas son muy importantes y evitará ingerir calorías vacías, que no rendirán hasta el almuerzo. Necesitas una buena nutrición para mantener la energía", afirma.

Ahora que ya te dimos estos pequeños tips para ayudarte en tu día a día, solo queda de tu parte ponerlos en práctica.

Actualidad Laboral / Con información de Expansión México