Lejos de quedarse en un mero recurso motivado por las especiales circunstancias de la pandemia, el teletrabajo se revela como una modalidad laboral que incrementa la productividad, la satisfacción y el grado de compromiso de los trabajadores. Pero para que el trabajo remoto sea plenamente efectivo es necesario que se den una serie de condiciones que permitan aprovechar todas sus ventajas.


Esta es una de las conclusiones a las que ha llegado WorkMeter tras analizar los datos del primer Informe Anual de Teletrabajo, elaborado por la empresa especializada en herramientas tecnológicas de medición del tiempo de trabajo y publicado recientemente. Para la realización de este trabajo, WorkMeter analizó 46.295 registros de trabajo diario procedentes de empresas ubicadas en España de entre 40 y 500 empleados.


“Los datos de nuestro estudio demuestran que el teletrabajo funciona, así que ya no hay excusas para aparcarlo ahora que la pandemia ya no lo hace imprescindible. Pero, eso sí, es necesario establecer una serie de pautas y condiciones mínimas que permitan a empresas y trabajadores maximizar sus beneficios y aprovechar todo su potencial”, destaca Joan Pons, CEO de WorkMeter.


Recomendaciones para un teletrabajo efectivo


Teletrabajo… pero híbrido. Los datos del estudio de WorkMeter apuntan a que el teletrabajo es más efectivo cuando se combina con días de presencialidad. De esta forma, empresas y empleados se benefician de las ventajas de ambas modalidades. La tendencia es establecer modelos híbridos de 2-3 días de teletrabajo a la semana, dejando libertad al empleado para utilizarlos o no. En cuanto a los días concretos preferidos para trabajar desde casa, en general se tiende a concentrarlos en el último tramo de la semana (en especial, los jueves).


Educación y formación. Proporcionar formación y recursos a los empleados sobre cómo trabajar eficazmente desde casa puede ayudar a maximizar los beneficios del teletrabajo. La formación deberá tener en cuenta las características propias de esta modalidad y hacer especial hincapié en el manejo de las herramientas digitales o en el desarrollo de habilidades de comunicación a distancia.


Cultura de la autogestión. Formar a los empleados en técnicas de gestión del tiempo les ayuda a construir una autonciencia de trabajo, a focalizar mejor sus tareas y a que sean más eficientes en su ejecución. En este sentido, resulta fundamental que tanto empleados como empresas dispongan de datos objetivos de medición, tanto de tiempos como de rendimiento, que les ayuden a mejorar o implementar cambios en sus modos/ritmos/modelos de trabajo para conseguir sus propios objetivos.


Fomentar la autonomía y la flexibilidad. Además de enseñarles a ser más autónomos, las organizaciones deben permitir y estimular a sus trabajadores a que ejerzan esa autonomía tomando sus propias decisiones en relación a la gestión de su tiempo durante los días de teletrabajo. Esta flexibilidad conduce a mayores niveles de satisfacción y eficiencia.


Employee care. Otra conclusión clara que arroja el estudio es que empleados y, sobre todo, manager, tienden a sobrepasar su tiempo de trabajo cuando teletrabajan, por lo que se hace imprescindible establecer mecanismos de “desconexión digital” para limitar esos excesos.


Límites claros. Evitar la fatiga y el agotamiento también implica marcar límites nítidos entre el tiempo de trabajo y el tiempo personal, especialmente durante los días de teletrabajo, en los que esas fronteras tienden a difuminarse.


Invertir en herramientas de comunicación. Asegurarse de que los empleados tengan acceso a herramientas de comunicación eficaces puede ayudar a mitigar algunos de los desafíos asociados al teletrabajo, como la sensación de aislamiento o la falta de interacción con los compañeros.


Revisión regular de las políticas de teletrabajo. El mundo del trabajo está en continua y vertiginosa transformación. A medida que evolucionan la tecnología , los sistemas de trabajo y las prioridades de los profesionales, las organizaciones también están obligadas a revisar regularmente sus políticas de teletrabajo para garantizar que siguen siendo relevantes y efectivas.


Sistema de medición: Finalmente, resulta imprescindible disponer de un sistema automático de medición de tiempos de trabajo que, como la solución de WorkMeter, sea transparente y respetuoso con la privacidad, pero que evidencie la dedicación de cada miembro del equipo. Los datos no solo permiten a la empresas validar el impacto positivo del teletrabajo y disminuir las reticencias que pueden existir sobre esta modalidad laboral, sino que proporcionan una fotografía exhaustiva de los niveles de eficiencia y una comparativa de cómo gestionan el tiempo los empleados cuando están en la oficina


Actualidad Laboral / Con información de Equipos y Talento