Catar pagará un salario mínimo de 750 riales (unos 195 dólares) a los trabajadores migrantes, una reforma motivada por la próxima celebración en el país del Mundial de Fútbol de 2022, indicó este jueves a la AFP el ministerio de Trabajo.

Este salario no incluye la vivienda, la comida ni los gastos de salud, que estarán a cargo de los empleadores, indicó Isa al Nuaimi, explicando que se trata de una cifra provisional y podría aumentar.

El salario mínimo forma parte de un conjunto de reformas de la legislación laboral anunciadas en mayo, tras las críticas a Catar sobre las condiciones de trabajo de los cerca de dos millones de empleados migrantes que hay en el país, muchos de los cuales trabajan en las obras del Mundial.

"El salario mínimo temporal de 750 riales mensuales entrará en vigor de inmediato y seguiremos las evaluaciones para determinar el salario mínimo fijo", dijo el ministro.

"No aprobaremos ningún contrato de trabajo con un salario inferior a 750 riales mensuales", añadió.

"Todos los contratos tendrán ahora que ser aprobados por el ministerio de Trabajo (...) Si el contrato se modifica, aplicaremos los nuevos procedimientos", indicó.

Junto al salario mínimo, los contratos de trabajo tendrán además que estar registrados por el gobierno y los empleadores no podrán impedir a sus trabajadores que abandonen el país o cambien de empleo.

La semana pasada, tras el anuncio de las reformas, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) dijo que Catar no violaba los derechos de los  trabajadores y decidió cerrar el caso contra el país.

Actualidad Laboral / Con información de Swissinfo