Eli Defferary, una fininfluencer con más de 600.000 seguidores en TikTok, te diría que mucho dinero y poco tiempo son 4 palabras que nunca deben ir juntas.

Ahora bien, siempre y cuando no quieras comprarte un automóvil, una casa para alquilar o jubilarte antes de los 40, ahorrar dinero rápido puede ayudarte a proteger tus finanzas personales de la inflación.

La escalada de los precios es la peor enemiga del ahorrador, según dijo Juan Massana de Castro, responsable de Banco Mediolanum en la zona Madrid-Centro, en el SBM de Business Insider España sobre finanzas personales.

"Tenemos más de un billón de euros en depósitos remunerados prácticamente al 0% y eso supone que, si no invertimos ese dinero, si no intentamos sacar una rentabilidad, perderemos poder adquisitivo con total seguridad", explicaba Massana de Castro en el evento.

Para proteger tus finanzas personales y tu ahorro de la inflación, estos 11 trucos para ahorrar dinero rápido te ayudarán a tener más capacidad de reacción y a reforzar tu colchón de emergencia.

Revisa tu presupuesto

En momentos de dificultad económica, el presupuesto y el registro de gastos son las mejores herramientas para gestionar el dinero y planificar escenarios de riesgo.

Con la escalada de la inflación, muchos de tus gastos cotidianos se habrán disparado (la electricidad, la gasolina, la comida...) y podrás detectarlo fácilmente comparando los gastos de un mes con los de los anteriores. Revisa cada categoría y recorta todos aquellos que estén haciendo mella en tus cuentas.

Si aún no tienes una proyección de tus ingresos y tus gastos, así puedes crear un presupuesto en Excel fácil y rápido.

Elimina los gastos hormiga

Aunque no tengas un presupuesto, eres capaz de identificar los gastos hormiga en los que caes prácticamente todos los días. El café, los pequeños vicios, las compras compulsivas de comida...

Estos gastos suelen pasar desapercibidos porque, en cada pago, el importe no suele exceder los 5 euros. ¿Qué son 5 euros para darte un capricho? Prácticamente nada. Pero 5 euros a la semana son 20 euros al mes. Es decir, unos 240 euros al año.

Si eres amante del café y necesitas varias tazas al día, puedes optar por llevarte un termo al trabajo. Con una única cafetera a primera hora de la mañana puedes sobrevivir a toda la jornada de trabajo. Si tu pequeño vicio es el tabaco, mejor dejar de fumar. Y, para las compras compulsivas, date hasta 72 horas para saber si realmente necesitas eso que tanto te ha llamado la atención.

Cancela las suscripciones que no estés utilizando

Las suscripciones a las plataformas de streaming y algunas membresías se pueden considerar también gastos hormiga. Si bien no tienes por qué eliminarlas de tu presupuesto de forma radical, sí podrías cancelar aquellas que no estés utilizando últimamente.

Al final, este tipo de suscripciones no tienen ventajas por antigüedad ni compromiso de permanencia. Si un mes dejas de pagar una de las 4 plataformas que tienes, tú no te darás cuenta, pero tu yo del futuro agradecerá esos 10 euros extra.

Recurre a las tarifas más baratas para fibra y móvil

Contratar una nueva tarifa de fibra o teléfono móvil es una de las tareas más tediosas de una mudanza. Por este motivo, siempre terminamos casándonos con el operador más conocido.

En cambio, si dedicamos algo de tiempo a comparar a los diferentes operadores, muchos ofrecen lo mismo que las grandes empresas de telecomunicaciones por mucho menos dinero.

Ve al supermercado siempre con una lista de la compra

Si crees que no hay diferencia en tus gastos cuando vas al supermercado con una lista de la compra, prueba a hacerlo con y sin el listado para que veas cuánto gastas en cada partida.

Este error es una de las mayores aberraciones que cometes cuando vas al supermercado porque siempre terminas llevándote más productos de los que realmente necesitas.

Valora durante 72 horas lo que quieres comprar

Las compras compulsivas siempre son una mala decisión financiera —aunque algún capricho haya que darse de vez en cuando—.

Ahora, en momentos de incertidumbre y recesión económica, lo mejor es resistirse a la tentación de la nueva temporada y los gadgets tecnológicos. Si te cuesta mucho ser consciente de lo que compras en cada momento, prueba a darte hasta 72 horas para pensar si realmente necesitas lo que tanto ha llamado tu atención. Si es así, adelante. Si no, eso que te ahorras.

Aprovecha los descuentos, la membresía y las webs de 'cashback'

Antes de nada, has de saber que este truco tiene trampa. Las rebajas y las webs de compra con cashback son una trampa mortal para los compradores compulsivos. Por lo que, si no sabes identificar qué descuento es realmente el que necesitas, vuelve al punto anterior y deja tiempo entre las primeras impresiones y la decisión de compra.

Por el contrario, si eres de los que analizan fríamente cada compra, los eventos como el Prime Day de Amazon, el Black Friday y el Cyber Monday pueden ser la mejor oportunidad para conseguir a precio de ganga productos que necesites para tu hogar.

Busca alternativas a las actividades que te cuestan dinero

El ocio es una de las categorías de tu presupuesto que más sufre en momentos económicos difíciles. Las quedadas con amigos, las escapadas de fin de semana, los pedidos a domicilio...

Sin embargo, más allá del ocio en tu tiempo libre, también puedes tener rutinas que estén saqueando tu bolsillo cada mes, como el gimnasio. Esta es una de las actividades más fáciles de sustituir por una versión (casi) gratuita: el gimnasio en casa.

También podrías buscar transportes alternativos o planes baratos al aire libre que te permitan recortar tus gastos y divertirte todos los fines de semana.

Haz limpieza de armario

Muchas prendas de tu armario caen en el olvido cada año que pasa, aunque justifiques su existencia con eventos especiales —para los que siempre te acabas comprando algo nuevo—, para cuando subas o bajes de peso, o simplemente porque tienes espacio para tenerla ahí guardada.

Esa ropa sin usar podría convertirse en un ingreso extra en un momento de crisis económica. Si quieres seguir disfrutando del ocio sin privarte de nada, darle una segunda oportunidad a tu ropa, poniéndola a la venta en internet, podría compensar el efecto de la inflación en tus fines de semana.

Pon a la venta tu trastero

No hace falta poner en práctica el método Marie Kondo para saber que hay muchas cosas obsoletas en casa de las que podríamos sacar algún dinero extra fácil y rápidamente.

Los juguetes de la década de los 90, los clásicos españoles y los objetos de coleccionista pueden hacerte ganar una fortuna. Y hasta con monedas antiguas puedes sumar miles de euros a tu cuenta.

Activa más herramientas de ahorro

Si ya no puedes recortar más gastos en tu presupuesto, puedes activar mecanismos de ahorro que pasen desapercibidos en tu cuenta corriente. Los que más se han puesto de moda son los de automatización de un porcentaje de los ingresos, el preahorro, los redondeos, los retos de céntimos y horas.

Actualidad Laboral / Con información de Business Insider