Los trabajadores de los controles de seguridad que comprueban el equipaje de mano en el aeropuerto de Barcelona comenzaron el viernes una serie de paros parciales que amenazan con generar el caos en uno de los aeródromos más transitados de Europa.

Durante el primer paro de una hora, de los cuatro que habrá en el conjunto del día, los pasajeros tuvieron que hacer fila hasta 40 minutos para superar los controles de seguridad, pero la espera se redujo a 20 minutos al término de la protesta, explicó la autoridad aeroportuaria española, AENA.

Según el diario catalán La Vanguardia, las filas se demoraban más de una hora en el inicio de uno de los fines de semana con más desplazamientos en España por las vacaciones de verano.

El gobierno ordenó brindar servicios mínimos durante las horas de paro, lo que redujo el efecto de las medidas de fuerza.

Funcionarios de AENA y representantes de los trabajadores se reunieron el viernes en busca de una solución.

La huelga parcial del viernes _ que se repetirá el domingo y el lunes _ se convocó tras el fracaso de las negociaciones para cerrar una disputa entre los operarios y la empresa privada Eulen, que controla este servicio en el aeropuerto de El Prat.

A consecuencia de este conflicto laboral, los pasajeros de vuelos con salida en Barcelona llevan semanas sufriendo demoras en las zonas de embarque. Los trabajadores, que demandan más contrataciones y mejores salarios, tienen previsto iniciar un paro indefinido a partir del 14 de agosto si no se cumplen sus peticiones.

De acuerdo con los datos de la Asociación de Compañías de Transporte Aéreo, ACETA, unos 1.000 pasajeros han perdido sus vuelos desde el pasado 24 de julio por esta disputa.

El aeropuerto de Barcelona, como otros en Europa, se vio afectado también por importantes demoras en los controles de pasaportes por las nuevas regulaciones impuestas por la Unión Europea hace unas semanas.

Actualidad Laboral / Con información de AP