Hay varios caminos diferentes para ser millonario, unos supuestamente más rápidos que otros (más aún si heredas una fortuna o formas parte de una familia rica), pero la mayoría de la población mundial se encuentra muy lejos de conseguir ese objetivo.
Sin embargo, de vez en cuando, algunas personas lo logran, incluso de manera inesperada: la diferencia entre formar parte de la clase media o ser pobre y pasar a ser rico puede ser simplemente tener una idea que parece loca, absurda o simple.
En estos casos se trata de emprendedores que vieron una necesidad o una carencia y la convirtieron en una oportunidad (con un poco o 'un bastante' de ayuda o de suerte en muchos casos) de ganar dinero, mucho dinero. Estos son algunos:
Walt Disney
Oswald el conejo afortunado (Oswald the Lucky Rabbit) seguramente no te resulte familiar. Sin embargo, se trata de la primera creación de un personaje original por parte de Walt Disney, entonces bajo propiedad de Universal Pictures, para quienes trabajaba.
Un recorte salarial y su renuncia de la empresa dieron lugar a la necesidad de sustituirlo por otro personaje y, entonces, nació otro más conocido: un ratón al que llamaría Mickey Mouse y al que siguieron numerosos éxitos en la animación, así como la creación de un enorme y mundialmente famoso parque temático. "Quiero que no se parezca a nada en el mundo", avisó, según recoge Inc.
Antes de ser un emprendedor exitoso y millonario, con su propia empresa de animación, Walt Disney fue un niño que dibujaba caricaturas de caballos para divertirse y un creador de anuncios para periódicos y revistas para un estudio de arte, informa el medio.
Bill Gates
Bill Gates, fundador de Microsoft, es ahora la cuarta persona más rica del mundo (con 116.000 millones de dólares —unos 113.600 millones de euros, al cambio actual— de patrimonio neto, según Bloomberg) y ha llegado a liderar la lista durante años en el pasado.
¿Cómo se hizo multimillonario Bill Gates? Por supuesto, su pasión por los ordenadores y la programación desde que era adolescente ha influido, pero también han sido necesarias varias claves para generar una fortuna y, luego, saber administrarla y aumentarla.
El apoyo de sus padres, el interés por seguir adquiriendo conocimientos y por aprender de los errores, descansar al menos 7 horas cada día para poder ser creativo, la confianza en su asesor financiero, el amor por su trabajo, la constancia y la diversificación de su cartera privada son solo algunos de los motivos detrás de su patrimonio.
Steve Jobs
No puede faltar Steve Jobs en una lista de emprendedores famosos y millonarios en el mundo y en la historia.
Antes de fallecer con 56 años en 2011, Jobs tenía aproximadamente 9.300 millones de euros y podía 'presumir' de haber revolucionado la industria y haber influido sobre millones de personas a lo largo y ancho del planeta, dejando un legado que perdura más de 10 años después de su adiós.
Su paso por Apple, Disney, Pixar y NeXT, sus innovaciones y productos y su forma de pensar dieron un giro sorprendente a la tecnología, la música y el cine y contribuyeron a engordar su cartera.
Sin embargo, y aunque a los 23 años Jobs ya tenía casi un millón de euros, también hubo una adopción, dificultades económicas (comiendo gratis en un templo de los Hare Krishna), abandono de la universidad y la venta de su Volkswagen para financiar su aventura empresarial junto a Steve Wozniak.
J. K. Rowling
Otro caso de éxito, en esta ocasión muy alejado de los sectores antes mencionados, es el de la escritora británica J. K. Rowling, creadora de Harry Potter y un mundo mágico que ha absorbido a millones de personas en el mundo a través de libros, películas, merchandising y mucho más.
De hecho, la mayor parte de sus ingresos ya no proviene de los libros, sino de las atracciones Wizarding World (El mundo mágico de Harry Potter) de Universal Studios, apunta Forbes, que recoge una fortuna de unos 60 millones de dólares (59 millones de euros).
La idea que dio lugar a todo llegó durante un sueño y en una época de dificultades: Rowling era una madre soltera que tenía problemas para pagar el alquiler y que luchó contra la depresión y otros obstáculos.
Benjamin Franklin
Científico, político, inventor, hombre de negocios y héroe estadounidense, entre otras labores, Benjamin Franklin es una de las figuras más destacadas de la historia de EEUU y del mundo, al que se le atribuyen éxitos como el pararrayos o las gafas bifocales (y algún que otro fracaso).
"Era un empresario. Empezó de la nada. Solo era un niño fugitivo", ha declarado Elon Musk, millonario fundador de Tesla y SpaceX, sobre una persona a la que considera uno de sus héroes: "Franklin es bastante impresionante", afirma.
John D. Rockefeller
El apellido Rockefeller ha tenido tanta importancia en la historia que ha acabado integrado en el lenguaje de la gente y suponiendo una metáfora de riqueza y nivel socioeconómico elevado.
De vendedor de caramelos y desempeñar trabajos esporádicos para los vecinos, Rockefeller terminó siendo el fundador de la Standard Oil Company y un emprendedor que se hizo inmensamente rico gracias al petróleo, y con la perseverancia como la cualidad que más valoraba.
En su vida se encontraron luces y sombras: se le acusó de tácticas comerciales turbias para superar a sus competidores y donó 500 millones de dólares (490 millones de euros) a causas filantrópicas, informa Inc.
Oprah Winfrey
Con una riqueza actual de 2.500 millones de dólares (2.450 millones de euros), "Oprah Winfrey ha hecho la transición de su exitoso programa de entrevistas, que estuvo al aire durante 25 años, a un imperio de medios y negocios", describe Forbes.
Famosa y millonaria emprendedora, Oprah Winfrey ha sido considerada, además, la mujer más influyente del mundo. Antes, sin embargo, pasó por una infancia en la pobreza extrema, con vestidos hechos de patatas y siendo víctima de abusos sexuales por miembros de su familia, recoge Inc.
Su participación en una emisora de radio negra local, y su progresivo ascenso a otras mayores, dio lugar al paso a la televisión y al éxito de su programa y de su emprendimiento.
Roman Abramovich
Oligarca ruso que ha destacado en los últimos meses por las sanciones por la invasión de Rusia en Ucrania, su papel como negociador en las conversaciones de paz y su superyate.
Roman Abramovich, niño huérfano que creció en Moscú, dejó la universidad para ser emprendedor. A lo largo de su carrera profesional ha sido dueño del club de fútbol inglés Chelsea; inversor en compañías como el gigante de la industria petrolera Sibneft, Russian Aluminum y el fabricante de acero Evraz Group; y fundador de múltiples empresas de comercio de petróleo.
Gary Clegg
Probablemente el nombre de Gary Clegg no te suene de nada. De hecho, en 1998 solo era un alumno de primer año en la universidad de Maine en Orono (EEUU) que trataba de soportar el frío de su cuarto de estudiante metido en un saco de dormir.
Entonces, tuvo una idea: hacer un agujero en la tela para poder coger el mando a distancia de la tele. Más adelante se puso a perfeccionar el invento y le pidió a su madre que le cosiera unas mangas a unas mantas.
Así nació la batamanta, que pasó por pruebas y mejoras de diseño en los siguientes años hasta que, gracias a una inversión de su hermano, comenzó a producirla y venderla en masa, creando la compañía Slanket y llevando su producto a más de 40 países. En 2008, los ingresos de Slanket superaron los 4 millones de dólares, según The New York Times.
