Una cartelera de causas humanitarias y comunitarias que necesitan apoyo, es parte de la definición que dan sus fundadores a la Asociación Civil sin fines de lucro
Dar y Recibir.
Se trata de un emprendimiento social que busca a través de las redes y del portal
www,daryrecibir.org.ve, difundir casos de personas e instituciones de distintas partes del país que requieren ayuda para acceder a equipos y recursos para salvar su vida, para mejorar su condición, o para desarrollar una determinada actividad.
“Es una iniciativa que busca promover el valor de dar en Venezuela”, dice Alejandra García, presidenta de esta asociación civil que fue fundada en noviembre de 2013 y que empezó a operar formalmente a principios del año pasado.
En estos doce meses
Dar y Recibir ha atendido 25 causas humanitarias y comunitarias de las que hasta ahora sólo seis faltan por ser resueltas por completo. “(Han sido) 16 personas a las que cuales les pudimos cambiar la vida en un momento importante, sobre todo aquellas que necesitaban estos tratamientos médicos urgentes”, asegura García.
Quienes están al frente de este emprendimiento estiman que en este año de actividades alrededor de 500 personas naturales y jurídicas han hecho aportes para atender estos casos. Los aportes no sólo han sido en dinero, también han consistido en donativos de equipos, instrumentos y tratamientos médicos.
Beatriz Adrián, vicepresidenta y cofundadora de
Dar y Recibir, relata que en algunos casos las instituciones y personas se ponen en contacto directamente con quienes requieren de ayuda porque sus datos son publicados en la página web. Asegura que dos de las causas humanitarias dadas a conocer por esta asociación civil han sido atendidas directamente por entes del sector público.
Alejandra García sostiene que algunas de las personas que apoyan las causas difundidas por esa asociación, prefieren que sus nombres no sean publicados. Tanto ella como Adrián se muestran complacidas por la solidaridad, la preocupación y las ganas de ayudar que han observado en decenas de ciudadanos. “Hemos vivido experiencias muy milagrosas y maravillosas como que en 24 horas te responda una persona diciéndote que va a pagar toda la quimioterapia de un niño que vale 70.000 bolívares”, dice la vicepresidenta de
Dar y Recibir.
Las fundadoras de esta ONG, aseguran que publican en el portal todos los detalles de cada caso, de los donativos recibidos para cada uno, el monto total recaudado y el momento en que se utilizan los recursos, para garantizar la transparencia.
En 2014
Dar y Recibir obtuvo el segundo lugar en la categoría Emprendimiento Social del Concurso Ideas. La participación en esta competencia les permitió a sus creadores precisar algunos aspectos que les permitan garantizar la sostenibilidad del proyecto.
La meta de quienes están al frente es ir ampliando el número de causas atendidas y desarrollar proyectos sociales propios, como la creación de un espacio para brindar alojamiento a los familiares de las personas del interior del país que acuden a Caracas a recibir tratamiento médico. Esperan lograr alianzas con el sector privado para la concreción de estos proyectos de mayor envergadura.
Están convencidos de que aún hay mucho por hacer. “No nos llegan tantos (casos) como quisiéramos. Por ejemplo los comunitarios, tenemos que buscarlos nosotros, es algo que pensamos que iban a llegar mas rápido”, dice Alejandra García.
Además de García y de Beatriz Adrián, en la fundación de
Dar y Recibir, participó Ricardo Gamboa. Ellos comparten las tareas que impone el desarrollo de este emprendimiento. Las realizan en combinación con las obligaciones laborales y profesionales que tiene cada uno. Su idea es dedicarse en algún momento de manera exclusiva a este proyecto.
“Tener la posibilidad de una voz que escuchan otras personas y que se unan todas para resolver, eso es algo que te hace sentir que lo que estás haciendo vale la pena, que no estás perdiendo el tiempo, que no importan las horas extras que le dediques en la noche, en la mañana o en las horas de trabajo unos momentitos porque bien vale la pena hacerlo”, afirma Beatriz Adrián.
Además de duplicar el número de causas difundidas y resueltas este año, estos emprendedores, se proponen visitar hospitales y centros comunitarios para entusiasmar a las personas a que desarrollen proyectos sociales. También realizarán alianzas con otros emprendedores venezolanos para diseñar y ofrecer productos que puedan asociarse a las diversas causas que apoyan, con la idea de destinar a éstas una parte de los recursos que se obtengan por su comercialización.
“Nosotros hemos visto que el dar te hace feliz, más que el tener. Aquí todo el mundo se preocupa por el tener, nosotros hemos descubierto que en el dar está el secreto de ser feliz porque es el compartir, el poder entusiasmar a otro a que lo haga, el unirte”, sostiene Adrián.
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