Dos amigas están conversando sobre su dieta. La primera dice: “El próximo año quiero ser verde (saludable) y sentirme de maravilla”. La segunda dice: “El próximo año voy a ser verde y sentirme de maravilla”
Cuál crees que tenga mas chance de convertirse en verde y sentirse de maravilla. ¡Sip! La segunda.
“Querer” es simplemente tener el deseo de hacer o tener algo, mientras que “voy a” implica intención y compromiso a hacer lo que sea necesario para alcanzarlo.
Todo emprendimiento exitoso empieza por estar claros en lo que queremos y qué mejor que un “Mapa del Tesoro” para empezar a visionarlo.
Cómo hacer un Mapa del Tesoro
Ingredientes:
- Cartulina
- Tijeras
- Revistas
- Pega
- Intención
- Google Images e Impresora (opcional)
Preparación:
- Haz una lista. Para que un mapa del tesoro sea efectivo debe tener estructura y la mejor manera de lograrlo es dividiendo tus metas en categorías. Las categorías pueden ser infinitas pero trata de no complicarte demasiado haciendo listas muy largas. Como ejemplo te doy mi clasificación:
Metas del cuerpo o salud del cuerpo físico (ej. bajar de peso, entrenar, curarme de algún mal, hacer un maratón, etc.)
Metas del alma o metas espirituales (ej. meditar, ir a la iglesia, acercarme mas a Dios, ejercitar la compasión, el amor desinteresado, perdonar, ayudar al prójimo, etc.)
Metas de relaciones (ej. Mejorar la relación con mi mama, ser mas cariñosa con mi esposo, acercarme mas a mis hijos, no juzgar, ser mas tolerante, etc.)
Metas financieras y materiales (ej. Ingresos, una casa, un carro, trabajo, inversiones, etc).
Metas de crecimiento personal: (ej. estudios, cursos, lecturas, seminarios, terapeutas, etc.)
¡Importante!
Aunque unas metas puedan entrar en mas de una categoría o sientas que se solapan unas con otras, no te preocupes. Ponlas en una de las dos pues lo que quieres es que sea visualmente fácil de digerir.
¡Sé especifica! Esto es muy importante. Si quieres un carro (por ejemplo) describe el color, la marca, el año y se tan detallada como puedas. Esto también significa evitar generalizaciones como por ejemplo: “Quiero tener la casa de mis sueños”. La casa de tus sueños seguro es diferente a la mía y a la de tu mejor amiga, es por eso que debes describirla y visualizarla.
Mantén tu lista lo mas corta que puedas. Con esto no quiero decir que te limites pero no escribas tantas metas que llegues a sentirte aturdida, pues la falta de foco y la ansiedad te alejan de tus metas.
Pregúntate por qué. Una manera de reducir tu numero de metas es preguntándote por qué quieres tal o cual cosa. Pregúntate varias veces y llega a tu verdadero "por qué". Aquellas que tengan un por qué mas fuerte son las que debes dejar en tu mapa.
- Corta y Pega: agarra las revistas y las tijeras. Busca todas las imagen, frases, palabras y personas que describan tus metas y recórtalas. Si no encuentras todo en las revistas puedes hacer un google search de imágenes, imprimirlas e incluirlas en tu mapa.
Ahora pega las imágenes en la cartulina y ¡Voalá! tienes un Mapa del Tesoro que te ayudará a no distraerte de tus metas el año que viene. Puedes ponerte tan creativa como quieras y pintar con acrílico, decorarlo etc. pero técnicamente ya tienes el mapa.
- Cuélgalo en la pared. Ponlo en un lugar donde lo veas todos los días. Hacer un mapa del tesoro y meterlo en una gaveta es lo mismo que pagar un curso y no ir a clase. Estamos entrenando tu cerebro y convenciendo al inconsciente que el mapa es tu futuro. Queremos que no pierdas de vista la meta y evites distracciones.
Sabias que el 92% de las resoluciones de fin de año fallan?
What????? Seguro estas pensando… "y entonces para que c….. voy a hacer un mapa del tesoro?" ¡Calma!
Las resoluciones de fin de año fracasan por falta de un Plan. Una meta sin un Plan es solo un deseo. El Plan consiste en dividir esas metas (que parecen lejanas) en pequeñas acciones u objetivos digeribles y menos intimidantes.
Creo en la magia pero es importante que el plan sea sensato y pueda coexistir con tu tiempo y estilo de vida. La magia sucederá de forma sutil abriéndote puertas y dándote señales en el camino (siempre y cuando estés caminando).
El Plan también te permite tener una guía cuando pierdes motivación o interés en tu meta. ¡Sip, Sucede! Y nos sucede a todos.. aquello que nos hace vibrar el 1ero. de enero ya no parece tan atractivo en marzo… en Diciembre ya es historia.
Esto pasa porque la mente tiene mecanismos primitivos de preservación y evita lo desconocido (el dolor) y te hace regresar a lo conocido (seguridad). Dejas de levantarte para ir al gimnasio, metes el proyecto en la gaveta y no tienes tiempo para meditar. Hoy en día estas actitudes se llaman “mecanismos de sabotaje” porque nos hacen regresar a nuestra zona de confort y… dónde están tu sueños. Fuera de ella.
Cuando la motivación se vaya de paseo y te encuentres con su sombra, la apatía, recuerda el "Por qué" de tu meta. ¿Por qué escogiste esa meta desde un principio? Esto te ayudará a recuperar el sentido y seguir actuando.
Desistir de tus metas te hace dudar de ti misma, es por eso que no debes escogerlas con ligereza ni escoger demasiadas. Quédate solo con las que realmente quieras, se especifica y planifica.
Por último toma acción y no olvides celebrar cada paso por pequeño que sea, pues la suma de esos pequeños pasos son en definitiva Tu Meta.
"Un sueño escrito en un papel con fecha de caducidad se convierte en una meta
Una meta dividida en etapas se convierte en un plan
Un plan llevado a la acción hace que tus sueños se hagan realidad"
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Carolina Blaksley / Coach de Salud
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