23-12-2016
El legado del presidente Juan Carlos Varela debe ser “cambios estructurales” en Panamá que permitan “seguir progresando” al país, uno de los de mayor crecimiento del continente, que vivió un 2016 “muy duro” y espera un 2017 mejor, dijo el líder de la Cámara de Comercio, Industria y Agricultura panameña (CCIAP), Jorge García.

En una entrevista en la sede del gremio, que agrupa a más de 1.600 empresas de 15 sectores económicos, García aseveró que entre esos “cambios estructurales” hay algunos “impostergables”, como las reformas al sistema judicial y al método de nombramiento de los magistrados del Tribunal Electoral.

También está la modernización del Estado a través de una nueva gobernanza en las empresas que ofrecen servicios públicos como transporte, agua y recolección de desechos, que son un “desastre”.

Se trata de cambios constitucionales y legislativos “puntuales” que la CCIAP propone se realicen mediante reformas en dos períodos de Gobierno: uno, el de Varela, que las proponga al Parlamento para que este, en la siguiente Administración, las apruebe, explicó el empresario del sector de implementos médicos.

El 2017, previo al inicio de la campaña de cara a los comicios del 2019, “es el año” para impulsar las reformas, y la CCIAP tiene la “esperanza” de que Varela, en su discurso ante el Parlamento el próximo enero, “mencione los cambios a la Constitución, al Código Electoral y el tema de la modernización del Estado”.

Varela dijo en julio pasado, en el último de los dos discursos anuales ante la Asamblea Nacional (AN-Parlamento), que retomaría en el transcurso de un año la propuesta de reformar la Constitución, una promesa de campaña que había dejado de lado en el 2015 por considerar que no había los consensos necesarios.

Los cambios “profundos en la forma en que Panamá, como país, opera” le permitirán seguir por la senda del progreso que ha transitado en la última década, aunque con una ralentización a partir de 2012, señaló el presidente de la CCIAP.

El 2016 ha sido un año “muy duro” debido a factores económicos externos y escándalos que han involucrado a Panamá, como la filtración de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca sobre empresas extraterritoriales y la inclusión de empresas locales en la llamada Lista Clinton de EE.UU. sobre lavado de activos.

“Hay una percepción negativa, un sentimiento en el empresariado de preocupación” por el impacto a futuro de esos escándalos, que se cristaliza ya en un “pequeño aumento del desempleo”, ubicado en el 5,6 %, una tasa que sin embargo sigue “siendo muy buena”, reconoció García.

En materia interna, este año sectores productivos importantes como la construcción y el turismo han sido impactados, el primero por “la baja ejecución del presupuesto estatal en obras de infraestructura”, y el segundo por “la sobreoferta de habitaciones y el retraso de tres años” en la campaña internacional para promover el país.

Las ventas al por menor también se han visto muy golpeadas y este año solo crecerán un máximo del 3 %, de acuerdo con los cálculos de la CCIAP, que no incluyen el comportamiento del combustible y de la venta de autos, aclaró García.

Actualidad Laboral / Con información de Unión Radio