09-08-2017
Las protestas de médicos y docentes en Perú contradicen las intenciones presidenciales de modernizar el país a través de la educación y de la salud de calidad. Los gremios exigen el cumplimiento de las mejoras salariales prometidas en la campaña presidencial.

Las protestas de los médicos y docentes se extienden entre costa, sierra y selva, de norte a sur, por todo el país. El presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski enfrenta manifestaciones que le dejan políticamente contra las cuerdas. Hace un año, PPK anunció, en su discurso de asunción de mando, la transformación del Perú en un país moderno, basado en la educación y la salud de calidad.

Sin embargo, hoy la huelga médica y de docentes es un varapalo a sus intenciones: los médicos (con una paralización que sobrepasa un mes), y los maestros (con manifestaciones iniciadas hace más de 45 días), plantean mejoras salariales y de equipamientos que se prometieron en la campaña.

El presidente de la Federación Médica, Godofredo Talavera, exige que Kuczynski cumpla con la promesa de una inyección presupuestal de mil millones de dólares para mejoras salariales, de infraestructura y de protección biosanitaria. Esta suma representaría el 0.5% del PBI.

En tanto, la huelga de los maestros se torna aún más complicada. El Sindicato de Trabajadores por la Educación del Perú se ha dividido. Mientras la dirigencia nacional negocia un pliego de reclamos que contempla un incremento salarial de 2.000 soles (520 euros), las bases sindicales del sur y del norte del país piden un aumento de 4.000 soles (aproximadamente 1.000 euros). El secretario general del Sindicato General de Trabajadores por la Educación, Alfredo Álvarez, habló con RFI y dijo que la discordia interna en el gremio puede llevar a la pérdida del año escolar.

Para el analista Mirko Lauer, las huelgas en Perú tienen un evidente tinte político. Principalmente en el gremio educativo, donde algunas facciones del sindicato estarían vinculadas a partidos de la extrema izquierda y al desaparecido movimiento terrorista Sendero Luminoso. En el caso de los médicos, sostiene que existe una pugna donde una treintena de grupos internos hacen demostraciones de fuerza.

Sin embargo, estas peleas y huelgas sindicales se transforman en auténticos dolores de cabeza para el Poder Ejecutivo. Si Kuczynski no logra una solución política inmediata, el Congreso, controlado por una mayoría afín al expresidente Alberto Fujimori (preso por crímenes de lesa humanidad), podría interpelar a sus ministros de Educación y Salud, generándole una inestabilidad en su gabinete.

Actualidad Laboral / Con información de RFI