Como muchos lo definen, la patria es un concepto afectivo o emocional que une a las personas nacidas en determinado país por los sentimientos que todos ellos comparten hacia su historia, sus símbolos y sus tradiciones. El sentimiento común en torno al cual se construye el concepto de patria, puede resultar muy positivo para resaltar los valores que unen a la ciudadanía pero si el sentimiento es muy intenso o exagerado, puede desembocar en cierto fanatismo que justifique acciones o situaciones absurdas, de violación de derechos humanos o de transgresiones de garantías jurídicas básicas de quienes sienten y padecen por la patria.

Ayer en la noche mi esposa me mostraba un video que circuló en algunas redes sociales, supuestamente emitido por una televisora del Estado, en el cual se reflejaba cómo actuar ante ciertas situaciones que podrían implicar un perjuicio para las operaciones en la industria petrolera. El concepto de patria, se repetía sin cesar para justificar que, en determinadas circunstancias, se actuara vulnerando derechos básicos de la comunidad y los trabajadores.

No puedo creer que el video sea veraz y que realmente haya sido emitido públicamente, pero vamos a suponer que sí.

En el video se mostraban al menos dos situaciones en las cuales la operatividad de la industria se vería perjudicada. La primera situación que nos interesa es la protesta de la comunidad como un elemento perturbador de la operación de una empresa. En este caso se muestra un ejercicio de la milicia y la guardia nacional junto a los elementos de seguridad del complejo petrolero para disuadir y disolver la protesta. En modo alguno se sugiere canalizar o reportar el motivo de la protesta pues lo más importante es que la empresa opere normalmente.

Sin lugar a dudas, la prioridad máxima de todos los dueños y gerentes de empresas es la continuidad o normalidad de sus operaciones y esto no es criticable, pero ello obedece a un interés fundamentalmente económico y por ello el Estado dicta leyes que garantizan un balance entre los derechos de las comunidades y el interés empresarial, entendiendo la importancia que tiene para la población en general que se le garantice la producción de bienes y servicios en cantidades y calidad suficientes.

Para la justa defensa de la patria y garantizar así la paz, sería importante que las empresas privadas no fuesen asediadas por las comunidades que pretenden resolver problemas que corresponden a la Municipalidad o el Estado y que se actúe con contundencia en estos casos. Para defender la patria, en unión cívico-militar, es importante que sea política de Estado resolver y canalizar los reclamos de las comunidades, no disuadirlos ni disolverlos. Para que se defienda la patria, es importante que los ciudadanos se sientan seguros de su integridad física, anímica y económica.

La segunda situación que voy a comentar, es la afectación de la operación por un reclamo de un transportista. En el video se muestra como la unión cívico-militar resuelve una paralización realizada por un conductor que se niega a realizar el despacho de combustible, presuntamente por reclamos laborales. Observé con mucha atención como se detenía a este ciudadano en acción conjunta entre la milicia y los cuerpos de seguridad militar, y como un trabajador patriota retoma el control del vehículo para realizar el despacho.

Sin lugar a dudas, esta muestra de patriotismo la quisiéramos todos para nuestras empresas privadas. Sin embargo, haciendo a un lado que en el video podrían estar planteando la vulneración del derecho de protesta a los trabajadores, la verdad es que cualquier paralización ilegal, aunque sea de un trabajador o un grupo (organizado o no) de trabajadores, merece un tratamiento como el propuesto en el video. El problema es que en la empresa privada, es muy posible que no podamos contar con una unión cívico-militar perfecta que actúe con contundencia ante las paralizaciones ilegales que normalmente se llevan a cabo.

Yo fui un crítico de las milicias obreras, pero si todos de ahora en adelante estamos facultados para evitar paralizaciones ilegales como se propone en el video que comento, todo en el marco de la defensa de la patria y la garantía de la paz, debo decir como el cantor que tanto ha sonado estos últimos 15 años: “yo no me quedo en la casa pues al combate me voy…”.

¿Será que nos dejan a nosotros también actuar así?

Ángel Mendoza / Abogado

@angelmendozaqui