17-10-2016
Desde el modesto reventón del pozo Drake en Titusville Pennsylvania el 27 de agosto de 1859 hasta nuestros días el mercado petrolero ha experimentado sucesivas cartelizaciones producto de monopolios y oligopolios que han logrado dominar el mercado. Primero fue John D. Rockefeller y su Standard Oil Company, quien a partir de 1870 organizó un entonces anárquico mercado de pequeños productores independientes, aprovechando el monopolio de tarifas de transporte de los grandes ferrocarriles con los que negoció tarifas preferenciales.
Luego, cuando las leyes anti monopolio del Movimiento Progresista de Teodoro Roosevelt obligaron al Trust de Standard Oil a dividirse en varias empresas, el dominio del mercado pasó a un organismo regulatorio regional norteamericano; La Comisión de Ferrocarriles de Texas, que en virtud de sus potestades en el Estado productor de la mayoría del petróleo estadounidense en ese momento, fijaba el precio por vía de la regulación de las tarifas de transporte.
Terminada la Segunda Guerra Mundial, con la globalización de la actividad petrolera, y el derrocamiento del gobierno nacionalista iraní de Mohammed Mossadegh, se formó lo que se conoció como “Consorcio por Irán” que integraba el oligopolio conocido como las “Siete Hermanas”; la Compañía Petrolera Anglo-Persa (ahora BP), Gulf Oil, Standard Oil de California (ahora Chevron), Texaco (luego fusionada con Chevron), la Anglo-Holandesa Shell, Standard Oil de New Jersey (Esso/Exxon) y Standard Oil Company de Nueva York (llamada luego Mobil y ahora parte de ExxonMobil). El cartel de estas empresas dominó el mercado petrolero y 85% de las reservas mundiales hasta la Guerra de Yon Kippur de 1973.
A partir de ese momento, el dominio del mercado pasa a la OPEP, fundada en 1960 por los que en ese momento eran los cinco principales países petroleros del mundo fuera de EEUU y la URSS, a saber Arabia Saudita, Irán, Iraq y Venezuela. La organización luego incorporó a la mayor parte de otros exportadores de importancia hasta llegar a controlar el 70% de las reservas mundiales y establecer un sistema de cuotas de producción que le permitían establecer los precios.
Sin embargo, con el tiempo la OPEP fue perdiendo su hegemonía colegiada, ante el crecimiento de la producción Rusa, el estancamiento o desplome de la producción de socios fundadores como Iraq y Venezuela, y la irrupción de los productores de esquistos norteamericanos. En estos momentos representa solo una tercera parte de la producción total, y dentro de su seno Arabia Saudita y sus aliados del Golfo son abrumadora mayoría, motivo por el cual la decisión de los saudís de recuperar mercado a los productores de esquistos por la vía de una guerra de precios se impuso desde inicios del 2015.
Pero aún los bolsillos profundos de Arabia Saudita no aguantan por mucho tiempo un déficit gigantesco en sus cuentas públicas que le obliga a imponer sacrificios a sus súbditos, sacrificios que pueden hacer peligrar la Monarquía Absolutista. La consecuencia es que comienza a vislumbrarse una nueva re cartelización del mercado que, hoy por hoy tiene tres grandes jugadores, a saber: Arabia Saudita, Rusia y EEUU.
La primera señal de este nuevo orden es la manifestación de voluntad de Rusia de coordinar políticas de producción con los saudís y los actores de reparto que todavía la acompañan en la OPEP. El solo hecho de que estas conversaciones se estén dando le ha puesto un piso de unos $ 50 a los precios.
La segunda está por verse, ya que envuelve a los más dispersos productores de esquistos, un grupo que por su propia naturaleza es más dado a la competencia feroz que al acomodo en carteles. Pero dos factores los pueden acercar al convenio; primero, que el reciente bajón les haga ver las ventajas de la cooperación, y segundo, que de ganar Clinton la presidencia, las presiones gubernamentales hacia el impulso de la energía limpia indirectamente contribuya a limitar la producción estadounidenses con iniciativas como el bloqueo del oleoducto Keystone por parte de la administración Obama.
Aurelio F. Concheso / Ingeniero
www.laotraviarcr.blogspot.com
@aconcheso