03-11-2014
En una severa reducción de la producción nacional, limitaciones a las importaciones y restricciones para acceder a las divisas resumen este año 2014, los comerciantes formales del país. Así mismo advierten que se mantienen a la espera de las decisiones gubernamentales dirigidas a “enfrentar los desajustes macroeconómicos que imposibilitan el funcionamiento eficiente de la administración pública”.
En este sentido, los afiliados al Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), consideran que “el Gobierno debe racionalizar el desempeño público, hacerlo realmente eficiente mediante la limitación de la inmensa cantidad de trabas burocráticas que debe cumplir la ciudadanía para formalizar su relación con el Estado. A menores trabas, menos desempleo, menos comerciantes informales, más pequeñas empresas generadoras de empleos y más contribuyentes, menos empobrecimiento y más bienestar”.
En particular, los comerciantes formales han percibido el aumento en las tarifas de los servicios públicos como “verdaderos costos parafiscales por su mala calidad, generación de pérdidas en los establecimientos e imposibilidad de resarcir el daño provocado”.
Y sobre la restricción a los informales de vender 42 productos, recientemente oficializado, como una manera de combatir la escasez y la inflación, consideran que no tendrá efecto alguno en estos indicadores, pero si en quienes dependen de este tipo de trabajo. “Esa informalización comercial no es sino consecuencia del desempleo, de la desaparición de las fuentes formales de trabajo, de la ausencia de oportunidades para venezolanos en capacidad productiva”, entre otros factores.
Consecomercio analizará estos temas en la celebración del Día del Comercio y los Servicios, en Puerto Ordaz.
Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas