Maquillaje y peluquería, carpintería, chocolatería, mecánica automotriz y telecomunicaciones son las principales áreas en las que hasta ahora Trabajo y Persona ha formado a personas de distintas edades, en algunos casos para que inicien un negocio propio que les de la oportunidad de desarrollarse y de alcanzar su bienestar y el de su familia, y en otros, para que puedan insertarse al mercado laboral mediante el desarrollo de destrezas y habilidades para realizar algunos oficios.
Esta Asociación Civil fue fundada en 2009. A partir de ese momento ha capacitado a más de 1.000 personas como emprendedores y trabajadores y a otras 200 como instructores. “El objetivo es recuperar la dignidad de las personas, del ser humano, a través del trabajo”, dice Alejandro Marius, fundador de esta asociación.
Marius, Ingeniero en Electrónica, relata que dejó su posición en una empresa trasnacional para dedicarse a esta iniciativa con el propósito de proporcionar a las personas que lo necesitan, capacitación y herramientas para desempeñar un oficio de calidad. “La cultura del trabajo es lo que permite al hombre ser feliz”, destaca.
Durante sus cinco años de operaciones, Trabajo y Persona ha adelantado cursos y talleres a través de alianzas con instituciones como Fe y Alegría, y de empresas privadas que participan en esta iniciativa a través de sus programas de responsabilidad social. Este trabajo coordinado ha permitido por ejemplo, formar emprendedores en carpintería, en mecánica automotriz, en peluquería y preparar a jóvenes para desempeñarse como instaladores del servicio de televisión por suscripción de una reconocida empresa de telefonía del país.
“Nosotros trabajamos con Fe y Alegría, con los Salesianos, con pequeñas parroquias, con Invecapi (Instituto Venezolano de Capacitación Profesional de la Iglesia), con centros de capacitación en centros comunitarios u otras asociaciones que tienen los centros y que nosotros ayudamos a desarrollar proyectos formativos e innovadores. Es decir, que se adapten más a las necesidades del mercado, a las necesidades de las empresas, para poder financiar a través de su responsabilidad social. Entonces hacemos un diseño de esos programas, los implementamos nosotros de la mano con los centros de capacitación ya existentes y después formamos a los formadores que están ahí para que sean ellos quienes los puedan replicar”, explica Alejando Marius.
Entre sus programas, Trabajo y Persona cuenta con un diplomado realizado en conjunto con la Universidad de Carabobo, el Centro Jesús Obrero de Guacara, en el Estado Carabobo, y una importante empresa automotriz, para capacitar mecánicos en esta área.
Alejandro Marius, expresa que además de los programas de responsabilidad social de distintas empresas privadas, esta asociación civil también sustenta su actividad mediante proyectos de cooperación puntual con entes como la Unión Europea y Venezuela sin Límites, y mediante donativos. Actualmente trabaja en conjunto con empresas privadas en una iniciativa en el área de la chocolatería con la que busca lograr la sostenibilidad de esta asociación a largo plazo.
Trece personas conforman el equipo de trabajo directo de esta asociación civil, y otras 15 se incorporan como formadores puntualmente, dependiendo del requerimiento de cada programa de capacitación.