Hace casi dos décadas, la Universidad Valle del Momboy (UVM), en Valera, Estado Trujillo incluyó en sus programas de formación, módulos dirigidos capacitar a los estudiantes para crear sus propias empresas y de esta manera promover el desarrollo de esa entidad.

Francisco González, fundador y ex rector de esta casa de estudios, argumenta que Trujillo siempre ha contado con un gran potencial humano, pero que tradicionalmente ha requerido desarrollo productivo. “Necesitábamos personas que tuvieran una formación integral, pero además un gran espíritu de creatividad e innovación y sobre todo espíritu emprendedor para generar puestos de trabajo o transformar las estructuras del estado, por eso se arma una universidad con un curriculum integral”, argumenta.

Desde el inicio de sus actividades, una parte del curriculum de esta casa de estudios estuvo destinado a la elaboración de proyectos para emprender. Originalmente se llamaron Proyectos Institucionales (PRI) y luego, pasaron a denominarse Proyectos de Innovación (PROPI).

“La idea originaria es que en siete semestres el estudiante aprendiera todos los procesos que van desde concebir una idea hasta montar una empresa”, recuerda el profesor Francisco González.

En 2006 se crea la Aldea Emprendedora de la Universidad Valle del Momboy, y en ese momento se ajusta a cinco semestres la formación para emprender. “En aquel momento definía el emprendimiento como proyectos integrales o proyectos de desarrollo, porque la universidad también fue pionera en el uso de una tecnología de desarrollo humano sustentable. Tomamos cuatro áreas del desarrollo humano sustentable: la propia sustentabilidad, el capital social, la economía social o economía solidaria y el desarrollo local”, dice el docente al destacar que uno de los objetivos era impactar de manera positiva el entorno de la universidad y el espacio en el que se desenvolvía el estudiante.

En general, los profesionales que egresan de esta universidad en las distintas carreras que imparte como Ingeniería, Computación, Contaduría Pública y Administración de Empresas, están capacitados para emprender. Además de la formación a estudiantes de pregrado, esta casa de estudios ha contado con un programa para docentes multiplicadores de emprendimiento y con un programa de emprendimiento corporativo.



Algunas empresas privadas han solicitado a la Universidad del Valle de Momboy este último programa para orientar y a sus trabajadores y estimularlos para que desarrollen proyectos innovadores.

“Yo creo que fue un aprendizaje en el camino, teniendo bastante dificultades”, dice el ex rector de la universidad al referirse al desarrollo de la iniciativa de formación de emprendedores.

El docente considera que aún hace falta mucho por hacer. No han alcanzado el impulso productivo y creador al que han aspirado para el Estado Trujillo. “Estamos lejos de lograr los objetivos, incluso dentro del programa estamos siempre revisándolo porque no es fácil”, dice.

Lamentan que un número importante de los egresados se haya trasladado a otras regiones y a otros países. “A nosotros nos da un sentimiento que muchos de estos muchachos se han ido(…) La destreza se gana, lo que nosotros queríamos era que se aplicara al caso trujillano”, afirma Francisco González.

Desarrollo Humano Sustentable, Espíritu Emprendedor y Desarrollo Ético, son las “destrezas transversales” que busca desarrollar en los estudiantes la Aldea Emprendedora de la UVM. “Un muchacho que sea emprendedor, pero que ese emprendimiento este comprometido con la filosofía del desarrollo humano sustentable, pero que además sea una persona que no utilice su talento para hacer daño”, dice el docente y ex rector de la UVM.

En Venezuela el emprendimiento y la formación de emprendedores es una preocupación que cada vez comparten más personas e instituciones, sin embargo, el profesor Francisco González considera que es necesario que un mayor número de personas se involucre en este tema, que se incremente la calidad de los servicios públicos y que disminuya el número de trámites para formalizar una empresa, para que la actividad emprendedora se desarrolle con menos tropiezos. “En Venezuela las iniciativas han sido mayormente de soñadores que hemos tomado esto como una pasión”, dice.

El fundador de la Universidad del Valle de Momboy advierte a quienes se inician en el desarrollo de una idea de negocios que además de la innovación, es necesario tener constancia para ver los resultados del emprendimiento. “Hay mucha gente que cree que va a tener éxito en un año. El verdadero éxito se logra durante mucho tiempo”, dice.

Fotos: Cortesía Universidad Valle del Momboy

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