24-09-2020

El número de personas en Estados Unidos que solicitan ayuda económica del gobierno por desempleo aumentó ligeramente la semana pasada a 870.000, una cifra históricamente alta que muestra que la pandemia viral continúa afectando a restaurantes, aerolíneas, hoteles y muchos otros negocios seis meses después de que surgió por primera vez en el país.


La cifra coincide con la evidencia de que algunos estadounidenses despedidos recientemente enfrentan retrasos en la entrega de la prestación, al tiempo que las agencias estatales intensifican los esfuerzos por combatir casos fraudulentos y despejar el camino de solicitudes acumuladas.


Las autoridades de California han anunciado que dejarán de procesar nuevas solicitudes por dos semanas en un intento por reducir las acumulaciones y evitar atender casos fraudulentos. Pensilvania ha detectado que hasta 10.000 presos están recibiendo la ayuda indebidamente.


El Departamento del Trabajo señaló el jueves que el número de personas que continúa recibiendo la prestación por desempleo se redujo a 12,6 millones. El constante declive en esa cifra en los últimos meses refleja que algunos de los desempleados están siendo recontratados, pero también indica que a otros se les ha agotado su ayuda regular por desempleo, la cual dura seis meses en la mayoría de los estados.


Además de quienes reciben ayuda económica a través de programas estatales, aproximadamente otros 105.000 fueron agregados en un programa ampliado de prestaciones por desempleo que brinda 13 semanas adicionales de asistencia. Tal programa, creado como parte del paquete de ayuda económica que el Congreso aprobó este año, actualmente otorga la prestación a 1,6 millones de personas.


Las solicitudes de ayuda por desempleo se dispararon en la primavera después de que el brote viral generó el cierre repentino de negocios en todo el país, eliminó decenas de millones de empleos y detonó una recesión profunda. Desde entonces, al tiempo que los estados reactivaban lentamente sus economías, se ha recuperado cerca de la mitad de los empleos que se perdieron inicialmente.


Aun así, el crecimiento laboral se ha ido desacelerando. En la mayoría de los sectores económicos, los empleadores se muestras reacios a contratar a nuevos empleados ante una profunda incertidumbre sobre el rumbo que tomará la pandemia.


Las crecientes preocupaciones sobre solicitudes fraudulentas de prestaciones por desempleo se han concentrado en su mayoría en un nuevo programa, la Ayuda por Desempleo por Pandemia (PUA, por sus siglas en inglés), el cual hizo elegibles por primera vez para la ayuda económica a empleados autónomos, trabajadores en el sector de la economía colaborativa y contratistas.


Si bien se calcula que cerca de 14 millones de personas está gozando de la prestación bajo este programa, los economistas consideran cada vez más que la cifra no es confiable y probablemente esté inflada, tanto por solicitudes fraudulentas como por un conteo inexacto. La cantidad de personas que recibe las prestaciones a través del programa PUA es probablemente sobreestimada por varios millones, de acuerdo con los economistas.


Actualidad Laboral / Con información de AP