03-09-2019


En marzo del año 2017, las diputadas del Partido Comunista chileno, Camila Vallejo y Karol Cariola, presentaron al congreso el proyecto de ley que busca reducir de 45 a 40 horas la jornada laboral en Chile. Sin embargo, el tema no se había discutido sino hasta hace un mes, cuando la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados decidió aprobar la idea de legislar.


La iniciativa plantea, en concreto, reducir a 40 las horas de trabajo por semana, distribuidas en cinco jornadas, de ocho horas cada una. "¿Por qué planteamos 40 horas? Porque responde a las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el convenio de 1935 que ha sido ratificado por varios países. La mayoría de ellos han propuesto avanzar en esta línea, en función de buscar mejorar la calidad de vida de los trabajadores y las trabajadoras”, dijo a DW la diputada Karol Cariola.


El Gobierno chileno, y el propio presidente Piñera han criticado abiertamente la iniciativa en más de una oportunidad. "Tal como se presenta, el proyecto del Partido Comunista significaría una pérdida de entre 250 a 300 mil empleos”, sentenció recientemente en entrevista con Emol TV.


Paralelamente, su vocera, Cecilia Pérez, ha señalado que "existe convicción de que este es un proyecto inconstitucional”, argumentando que la medida que proponen las comunistas, tendría un fuerte impacto en el gasto fiscal del país. De hecho, el Ejecutivo dio a conocer un informe de la Dirección de Presupuestos en el que se indica que puede haber un costo de hasta US$ 240 millones, de aprobarse la iniciativa.


Este tema no ha pasado desapercibido entre los chilenos. Las últimas encuestas han dado a conocer que es lo más debatido en Chile, goza de alto conocimiento público y, por sobre todo, de un fuerte respaldo ciudadano, con cerca del 70% de apoyo. En ese contexto, es que el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, fue el político designado por el Ejecutivo para liderar la contraofensiva al proyecto de ley y para dar a conocer en detalle la nueva propuesta del Gobierno, en el marco de su reforma laboral.


El proyecto del Gobierno


El Gobierno del presidente Piñera, entendiendo el avance de la propuesta de los comunistas, hizo un giro en su estrategia y presentó el 8 de agosto su propia iniciativa para reducir la jornada laboral.


De esta manera, el nuevo proyecto del oficialismo plantea una reducción a 41 horas semanales, pero de manera gradual, que terminaría por concretarse el 2027. “Nuestro proyecto es mejor, porque permite reducir la jornada de manera gradual y con flexibilidad, como lo han hecho todas las economías desarrolladas. Con esta gradualidad, las pequeñas y medianas empresas (Pymes) pueden adaptarse al nuevo escenario”, defendió ante DW el subsecretario de Trabajo, Fernando Arab.


Ante el avance del proyecto que ya fue despachado por la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados a la Sala, el Presidente Sebastián Piñera insistió que la iniciativa es inconstitucional y que recurrirá a todas las herramientas que tiene para evitar que se convierta en ley.


"Todo lo que tiene que ver con el gasto público es una iniciativa exclusiva del Presidente, no pueden los parlamentarios crear gasto público, imagínese si pudieran hacerlo, cómo sería el desorden fiscal que tendríamos en Chile", dijo el Mandatario.


Actualidad Laboral / Con información de DW y Emol