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El doping laboral


Cada día trae su afán, dice el dicho. En el corre corre de todos los días a veces las personas no tienen tiempo para ellas, sino que solo pueden pensar en las tareas que tienen pendientes para la siguiente mañana y encontrar la mejor manera de rendir en su trabajo.

Es normal que las personas se sientan agotadas dentro de sus horas laborales, debido a distintos factores como dormir mal, una alimentación poco balanceada, estrés y demás.

En la actualidad, a los trabajadores se le ejerce mucha presión para que en un entorno competitivo, los resultados de su trabajo no sólo se vean reflejados sino que también destaquen. Sin embargo, esto en ocasiones conlleva a que muchas personas opten por optimizar su trabajo bajo el efecto conocido como "doping laboral", que se genera cuando se abusa de fármacos legales e ilegales para obtener un desempeño óptimo o superior al momento de trabajar, como lo hacen algunos deportistas de alto rendimiento.

¿Qué es el doping laboral?

Este fenómeno estimulante se ve con mayor frecuencia en países desarrollados, como Alemania, en donde se estima que alrededor del cinco por ciento de los trabajadores consumen drogas psicotrópicas, anfetaminas e incluso otros estimulantes naturales como la cafeína o la nicotina.

Otro país en el que se puede evidenciar frecuentemente el "doping laboral" es Estados Unidos, donde aproximadamente el 25% de los estudiantes de distintas universidades hacen uso de medicamentos para rendir en el estudio.

La naturaleza de estos fármacos, legales o no, es que le permiten a la persona sentirse más activa mentalmente, para lograr un alto rendimiento y mayor productividad; sin embargo, pueden crear una adicción y altos niveles de dependencia a mediano y largo plazo.

Algunos efectos secundarios al consumir estas drogas es que pueden provocar dependencia. Sin embargo, dejar estas sustancias también afecta a la persona al producirle abstinencia, que a su vez ansiedad y alteraciones en las actividades diarias.

En otros casos, se produce hipertensión, palpitaciones anormales, problemas en la piel, e incluso episodios de trastornos como las alucinaciones.

Ante este problema muchas multinacionales han optado por realizar pruebas antidopaje periódicamente antes de realizar alguna contratación o por sospecha, para garantizar que sus empleados no estén trabajando bajo la influencia de ninguna sustancia que pueda perjudicar sus labores o impida que la persona tenga un buen comportamiento dentro de la empresa.

Actualidad Laboral / Con información de KienyKe