Llegar hasta el punto más alto de tu carrera no ha sido fácil. El camino es largo, con multitud de dificultades y cuando lo conseguiste todo cambió. Tus métodos y herramientas de trabajo ya no son tan productivos como antes. Además, es posible que tus estrategias de gestión de equipos estén obsoletas. Sin embargo, reconocer que uno no se encuentra en su mejor momento laboral es difícil de admitir. A continuación, ocho señales que indican que un líder debe abandonar.

Usted teme ir a trabajar

Ya no despiertas cada mañana con la misma motivación y entusiasmo como antes por llegar a la oficina. Para evitar que tu desmotivación contagie a tus empleados, debes pensar en una estrategia para recuperar tus ganas.

No pide opinión crítica

Hace tiempo que no te reúnes con su equipo y recibes las opiniones críticas y sinceras de los que te rodean. Pide opinión crítica a los miembros de tu equipo sobre cuestiones que hasta ahora nunca has planteado. Además, mantente abierto a sugerencias y a realizar cambios.

La innovación ya no es tu prioridad

Si de tu mente ya no nacen nuevas ideas o iniciativas constantemente y lo que haces es seguir las tendencias en vez de crearlas, es posible que tu liderazgo, tarde o temprano, se ponga en duda.

Ya no frecuentas eventos empresariales

Hace meses que no visitas un encuentro con otros líderes y eventos del sector. Sin embargo, la visibilidad en redes sociales y círculos empresariales debe ser constante.

Te consideras imprescindible

Los líderes que han desempeñado su papel durante mucho tiempo a menudo se sienten insustituibles. Piensas que nadie entiende la empresa y tiene la misma red de contactos como tú.

Es necesario dejar el ego a un lado y empezar a evaluar las necesidades de la empresa.

Abandonaste el aprendizaje continuo

Los nuevos problemas requieren nuevas soluciones. Las últimas tendencias del mercado obligan a líderes y empleados a un reciclaje continuo de conocimientos.

Sufres el estrés del éxito

El estrés que te provocan tus responsabilidades no te dejan disfrutar de los aspectos positivos de tu liderazgo.

No cuentas con la confianza de tu equipo

Tu equipo ya no confía en ti para realizar propuestas arriesgadas y sientes que no espera el apoyo que si recibía en el pasado. Es el momento de replantearte si abandonar o realizar cambios estructurales en tu liderazgo.

Actualidad Laboral / Con información de Forbes