Desde las organizaciones han tomado conciencia de que muchos empleados están estresados, algo agobiados e, incluso, tienen miedo. Ante esto, fortalecen sus comunicaciones internas, pero sobre todo llevan a cabo actividades que busca interactuar con ellos, divertirlos y fortalecer los vínculos.


Algunas personas buscan apoyo psicológico o se relajan mediante el deporte al interior de sus casas, con sesiones de pintura o cualquier pasatiempo que los pueda distraer. Desde las empresas han tomado conciencia de que las acciones laborales producto de la pandemia han cambiado, por lo que se requiere hacer un mayor esfuerzo en comunicación y apoyo en general.


Un estudio de la consultora Randstad indica que "el 51% de los encuestados ha visto afectada su salud mental desde que se encuentra desempeñando sus responsabilidades laborales desde casa, situación que se ha extrapolado al clima organizacional". Además, el documento muestra que 44% asegura que el ambiente laboral, tanto en su compañía como al interior de su equipo de trabajo, se ha deteriorado desde que trabaja a distancia.


Es por esto que en situaciones de crisis es clave desarrollar instancias para que los equipos se relajen y mantengan el contacto. "La efectividad de un equipo depende de la calidad de sus interacciones. No se trata de tener más o menos conectados, sino que los momentos en los que el equipo necesita conectarse sean momentos productivos. Claramente, esa productividad está relacionada con el nivel de compromiso que cada integrante tiene con la empresa, el equipo y la tarea y desde ya del nivel de confianza desarrollada. La conexión remota hace que los integrantes del equipo estén expuestos a muchas barreras para continuar con la colaboración y los niveles de productividad acostumbrados", indica Gonzalo Rossi, CEO de Whalecom.


Paola Veloso, sales manager de Visma Latinoamérica, recomienda que desde Recursos Humanos se fomenten estos momentos de encuentro para no hablar de trabajo, sino proponer un espacio en el que todos puedan contar cómo es su realidad diaria. "Los malabarismos para realizar tareas laborales y del hogar, colaborar con personas mayores de la familia, con los niños y sus tareas, lo duro de vivir sólo en estos momentos, etc. Son espacios de desahogo en los que la gente se abre sinceramente, que sirven para conocerse y ayudan a entender mejor al otro, y hasta sentirse identificado y reírse de las mismas dificultades diarias en un escenario impensado", agrega.


Mantener las actividades



En L’Oréal Argentina, se fortaleció más que nunca la comunicación interna para informar, contener y dialogar con los trabajadores. "Desde el inicio de la pandemia incrementamos la comunicación con nuestros empleados, informándoles sobre lo que está sucediendo y también acerca de las medidas que está tomando el grupo tanto a nivel global como local, para llevarles tranquilidad", señala Brenda Bianquet, gerente de Asuntos Públicos y Defensa.


Pero junto con el apoyo más tradicional, el cual intenta mantener a los colaboradores informados y así poder bajar el nivel de ansiedad; se busca también crear instancias para que se relajen y diviertan.


En Natura han llevado a cabo actividades regionales y locales, donde distintos colaboradores han realizado webinars, clases de yoga o gimnasia de pausa, todo esto para liberar el estrés. Al mismo tiempo, cuentan con un equipo de trabajo regional que vela por la experiencia de los trabajadores.


Pero la empresa de cosmética también se ha ocupado de que en medio del confinamiento se lleven a cabo actividades solidarias. A través de una denominada 'Naturatón', los colaboradores donaron parte de su tiempo y recursos para apoyar a las consultoras más afectadas por la crisis, recaudando $9,5 millones de pesos (más de US$ 11.000). "A esto se suma el trabajo de los embajadores de cultura ha sido clave para nosotros como área de comunicaciones internas, junto con la comunicación que realizan los mismos gestores con sus equipos", relata Cruz de Moraes.


En el caso de Visma Latinoamérica, han implementado el programa virtual “Master Class”, en el que los trabajadores pueden entretenerse y enseñar durante al menos 60 minutos temas como coctelería, huerta familiar, bordado mexicano, fotografía, etc. Junto con esto, Veloso dice que continúan festejando los cumpleaños, ahora en forma virtual, a través de una llamada de no más de 30 minutos; y se han implementado juegos online, que sirven para conocerse más y establecer un espacio de colaboración desde otro lado que no tiene ninguna relación con el trabajo.


Asimismo, añade, que "se lleva a cabo el programa “Visma active at Home” con ejercicios para descontracturarse, moverse un poco y también para aprender a relajarse. Son espacios de escucha activa, con gran participación, en los que se logra conectar desde otro lado con el compañero de trabajo de todos los días, que motivan mucho a nivel individual y de equipo".


En Grupo ISA, también se han sumado a las actividades virtuales para contener a sus trabajadores. En la conferencia virtual "El Futuro del Teletrabajo" que organizó AméricaEconomía, Olga López, vicepresidenta de Tecnología e Información en ISA, dijo que a raíz de la pandemia se conformó un comité de crisis liderado por el presidente de la compañía junto con vicepresidentes y gerentes de las filiales en todos los países, además del líder de la mesa de salud. Todo esto, para asegurar la continuidad de la compañía en los países donde operan, pero también para mantener la salud y el bienestar de sus empleados. Junto con los planes de contingencia, crearon un sitio web para comunicar e interactuar con los colaboradores. También han llevado a cabo charlas para acercarse a los empleados, potenciar las herramientas de colaboración y atender el manejo del estrés.


López indica que hasta mensajes estratégicos y conciertos multiculturales han realizado. "Claramente, queremos que nuestros empleados se sientan vinculados con la compañía y tenga las mejores condiciones posibles, tecnológicas y humanas", concluye.


Sobre este tipo de actividades, Natalia Zúñiga, directora de Marketing & Comunicaciones de Randstad, señala que es conveniente impulsar acciones que habitualmente se pierden al estar distanciados y fomentar la cercanía entre los jefes con sus equipos. “Es necesario mantener los ‘rituales’ que se llevaban a cabo antes de la pandemia, como almuerzos periódicos, celebración de cumpleaños, happy hours, o cualquier iniciativa que contribuya a la cohesión y a la confianza del grupo, debido a que permitirá que sus miembros se distraigan, conversen sobre situaciones personales y alejadas de lo netamente laboral y se sientan parte de un todo, a pesar de estar teletrabajando”.


Hay que tener cuidado que este tipo de actividades se vuelvan en contra de la empresa. Rossi indica que estas instancias deben ser atractivas para los trabajadores y agregar valor. "En ningún caso deberían ser de participación obligatoria. El desafío es armar una oferta que atraiga los intereses de distintos perfiles y dejar que la asistencia la defina la atractividad de la propuesta".


Agustina Bellido, líder de Carrera de Mercer Chile, agrega que para evitar problemas "es importante tomar la temperatura de los equipos. La población está viviendo bajo altos niveles de estrés y la carga de trabajo en general ha aumentado. Es por ello que hay que cuidar que estos ambientes de relajación sean electivos y no mandatorios y, que los mismos, sean reales ambientes de distracción y preferiblemente dentro del horario de oficina o, en caso de que sean fuera del horario, que sean realmente un agregado de valor para el empleado y su familia".


El rol de los jefes


En un contexto como este, en el que se entiende que existe mayor autonomía y confianza entre el equipo, es importante encontrar nuevos rituales de trabajo y entender que las actividades sociales también han cambiando. Pero para gestionar esto, los jefes son claves.


Tanto en Natura como en Visma, los líderes han sido fundamentales para llevar a cabo este tipo de actividades. Y en esto, del Departamento de Recursos Humanos ha tenido que impulsar que el equipo se mantenga unido.


En Natura, los líderes de cada área se reúnen diariamente para analizar los desafíos a corto y largo plazo, y entregan herramientas para que los equipos de trabajo puedan sentirse cómodos y menos ansiosos a la hora de desarrollar sus labores. Para apoyar a los jefes en esta tarea de dirección de equipos, "hemos realizado coaching de liderazgo para todos nuestros gerentes de área para saber cómo liderar en tiempos de crisis. En estas instancias se realizan dinámicas sobre cómo se sienten los equipos, además de generar espacios virtuales para que podamos compartir experiencias", señala Cruz de Moraes.


El papel de los jefes, quienes conocen las aspiraciones, debilidades y fortalezas de los trabajadores, consiste en apoyar al equipo, pero también orientarlos en el camino de adaptación a este nuevo formato, que dado el actual contexto puede mermar la productividad de algunos.


Hay que entender, indica Rossi, que "una instancia de entretenimiento y socialización puede contribuir, pero son muchos los factores que convergen en el estrés de un colaborador ante una situación tan atípica como la pandemia. Es por esto que la organización tiene que diseñar propuestas que puedan atender a los intereses de todos los colaboradores. Incluso, hay organizaciones que yendo más allá de la generación de espacios de esparcimiento y socialización han implementado líneas gratuitas de ayuda psicológica para sus colaboradores e incluso los familiares de los mismos".


Actualidad Laboral / Con información de MBA Americaeconomia