El próximo 8 de marzo, fecha celebrada mundialmente como el Día Internacional de la mujer, fue convocada por el movimiento feminista español una Huelga General de Consumo. Teniendo esta como intención incentivar a un consumo responsable todo el año y, denunciar un sistema económico que se ve sostenido por “un batallón de mujeres trabajando de manera gratuita, y eso no se nos reconoce”, indicó Marta Pascual, miembro de la asamblea 8M y del grupo de Ecofeminismo de Ecologistas en Acción.

La acción está sustentada en cuatro pilares: el ámbito laboral, la parcela estudiantil, los cuidados y el consumo. El llamado ese día para la mujeres es a no realizar ningún tipo de compras, y evitar a toda costa el consumo. Pues, al ser una sociedad altamente consumista, el patriarcado y el machismo se ven sustentados en las desigualdades a la hora de la adquisición de productos.

Por ejemplo, tres de las críticas al modelo económico actual, son factores que inciden con mucho peso al momento de consumir. La primera es el llamado de atención a las publicidades que siempre buscan estigmatizar a la mujer, basándose en sus cuerpos de forma denigrante para poder vender. El segundo reclamo específico es la mal llamada “tasa rosa”, que es el referencial de precio que hace más caro un artículo, solo porque es de mujer, cuando no es casi nula la diferencia con el objeto especializado para hombres. Y, como tercer juicio tenemos las consecuencias medioambientales del sistema económico y de consumo neoliberal que según Pascual, "afectan más a las personas pobres y a las mujeres".

Así como el “Día de no comprar” es antítesis al conocido Black Friday, o el “Día de apagar la Luz” es contrario a los días regulares, esta Huelga de Consumo es más expresiva que otra cosa. Pues, más que hacer quebrar a las empresas, busca llamar la atención y que sean escuchadas sus voces, ante el inminente reclamo de que exista una sociedad igualitaria de género, en todos los aspectos. "No queremos que las tiendas cierren por falta de público, es algo más simbólico que logre mover el debate. Queremos dar una colleja al sistema” señaló Marta.

Además de esta huelga, el movimiento se mantendrá activo en el mes con otras acciones. Como por ejemplo, dejar mensajes feministas y motivacionales en los bolsillos de las prendas en tiendas, para que las mujeres los vean al probárselas. O también, la iniciativa de "comidas colectivas de tupper en las plazas, para hacer visible la huelga de consumo ese día, para mostrar: 'hoy no voy al bar' ".

Marta Pascual, en referencia a la convocatoria del próximo 8 de marzo, concluyó "No puedes hacer caer el sistema capitalista neoliberal en un día. Pero, es una demostración de valores, una acción estratégica para visibilizar un descontento".

Actualidad Laboral / Heller Palma