15-03-2024

El mercado laboral está viviendo unos tiempos convulsos con contantes cambios de tendencia en una suerte de lucha de poder entre empleados y empleadores. De la Gran Renuncia de los años 2022 y 2023, se ha pasado a los despidos masivos y los mandatos de vuelta a la oficina de 2023 y 2024.


En medio de todo este tira y afloja laboral hay una tendencia con cada vez más peso entre los jóvenes de la generación Z que se postulan para sus primeros empleos: el ghosting laboral. O, dicho de otra forma, no asistir a las entrevistas de trabajo e incluso no presentarse en la oficina el primer día de trabajo una vez ya has sido contratado sin avisar con antelación con una simple llamada telefónica. El portal de empleo Indeed ha llevado a cabo un estudio y el resultado ha sido que un 78% de los candidatos han ignorado a un posible empleador en el último año.


Del "ghosting amoroso" al "ghosting laboral". Simplificando mucho, el proceso de selección laboral se puede resumir en un match entre el empleador y el empleado. Ambos deben interés en la relación. Si uno de ellos lo pierde durante el proceso, aparece el ghosting. Al igual que sucede en las relaciones amorosas, el ‘Dejar en visto’ sin obtener una respuesta se está convirtiendo en una práctica cada vez más habitual en las relaciones laborales en todo el mundo.


Los datos hablan. La plataforma de empleo Indeed ha encuestado a 1.500 empresas y a 1.500 candidatos para su Informe de ‘Ghosting’ en la contratación 2023. Los resultados que han revelado sus datos son cuanto menos sorprendentes. El 78% de los candidatos afirma haber ignorado deliberadamente a los empleadores durante el año anterior. El 59% de ellos afirma estar arrepentido de ello, pero el 62% de los candidatos considera que podría volver a hacerlo en el futuro si se da el caso. El 23% de los candidatos opina que ‘dejar en visto’ a su empleador les empodera.


Más grave es que el 14% de ellos logró obtener el empleo, firmar el contrato y ausentarse el primer día de trabajo sin previo aviso tras encontrar información sobre malas experiencias de antiguos empleados.


Un problema al alza. Indeed lleva varios años repitiendo esta encuesta, por lo que ya puede ofrecer una perspectiva del problema que, lejos de reducirse, se ha incrementado en los últimos años. Esa es la opinión del 77% de los reclutadores, que opinan que el ‘ghosting laboral’ se ha incrementado con respecto a 2022. Desde el punto de vista de los candidatos, esa sensación ha ido creciendo ya que en 2022 era del 39%, mientras que en 2023 el 46% ya piensa que el ‘ghosting laboral’ es más habitual en los procesos de selección.


Razones para desaparecer. Según los reclutadores, uno de los primeros motivos que podrían justificar el desvanecimiento repentino de los candidatos es que han recibido una oferta de empleo más interesante, con mejor salario o, simplemente que no es el empleo adecuado para ellos.


Las respuestas de los candidatos confirman esta última como la principal razón para desaparecer sin previo aviso del proceso de selección, pero también lo fue descubrir que sus intereses no se alineaban con los de la compañía. Un salario insuficiente se sitúa como tercera causa para desaparecer. En contra de lo que piensan los reclutadores, recibir otra oferta de empleo queda relegada a la quinta posición para los candidatos.


La Gen Z ha girado las tornas del "Ya te llamaremos". Pese al incremento de esta tendencia, la generación Z no ha hecho más que reaccionar con las mismas armas a una práctica que los reclutadores llevan usando desde hace algunos años con los candidatos que no cumplían con sus expectativas. Se trata del popular (y devastador) "ya te llamaremos".


Por ese motivo, ahora el 70% de los candidatos encuestados opina que esta actitud es justa, mientras que el 50% de los empleadores cree lo mismo y el 69% lo asume como "parte del juego". El 54% de los reclutadores opina que ellos son parte responsable de este comportamiento por ofrecer una mala comunicación y poca transparencia con el candidato o someterlos a unos procesos de selección excesivamente largos.


Actualidad Laboral / Con información de Xataka