El plan de contingencia del gobierno británico para un Brexit sin acuerdo lleva el nombre de Operación Yellowhammer, en honor a una especie de ave. Fue lanzado por primera vez en junio de 2018, y contempla 12 áreas entre las que se incluye transporte, salud, energía, alimentos y agua.
La planificación está basada en los peores escenarios posibles: toma en cuenta, por ejemplo, demoras en la frontera de más de seis meses, aumento de controles migratorios en los puestos fronterizos con Europa, reducción en la variedad y disponibilidad de alimentos, y en incrementos potenciales del precio de los servicios, los alimentos y el combustible.
Y la operación Yellowhammer no es el único plan de contingencia para el Brexit, sino que se suma a otra serie de preparativos.
Esto, según un informe de la Oficina Nacional de Auditorías (NAO, por sus siglas en inglés), "refleja el hecho de que no es posible para los distintos departamentos planificar para cualquier eventualidad".
Y también que el gobierno necesitará tomar el control y coordinar rápidamente a las diferentes agencias para lidiar con cualquier interrupción (de los servicios) en el corto plazo.
Con la operación Yellowhammer, el gobierno ha estado investigando qué poderes ya existentes podría utilizar para priorizar el uso de combustible para los servicios esenciales o, por ejemplo, para extender los límites a las horas que pueden trabajar los conductores de camiones que transportan bienes.
Como parte de los planes de contingencia, el Ministerio de Defensa ha puesto a disposición 3.500 soldados, en caso de que sean necesarios.
También ha establecido una sala de operativos en un búnker para coordinar los esfuerzos en caso de que no se llegue a un acuerdo.
El Ministerio de Defensa no quiso hacer comentarios sobre qué rol podrían cumplir los soldados, solo señaló que "apoyarán los planes del gobierno".
A contrarreloj
Al elaborar su informe sobre la Operación Yellowhammer, a comienzos de mes, la NAO dijo que algunos preparativos en caso de que no haya acuerdo probablemente no estén listos a tiempo.
Por ejemplo, señaló que el gobierno no cuenta con tiempo suficiente como para implementar toda la infraestructura, sistemas y personal necesario para llevar a cabo operaciones en la frontera el primer día del Brexit.
El costo de la operación es parte de los US$1.960 millones que el Tesoro destinó a los departamentos del gobierno para prepararse para el Brexit.
Para que Yellowhammer funcione, la NAO dice que la estructura de "comando, control y coordinación" necesita estar implementada antes de que Reino Unido se separe de la UE.
Así, es posible que el gobierno decida activar la Operación Yellowhammer unos días antes de una posible separación sin acuerdo.
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