Seguramente lo primero que haces todas las mañanas tras despertarte es pasar un rato revisando tus correos electrónicos y redes sociales en tu smartphone. Sin embargo, este es un hábito que afecta de forma muy negativa a nuestra productividad.


Si deseas tener un día productivo, debes evitar empezar la mañana mirando pantallas. Te contamos qué cosas debes hacer en su lugar.


Mantén las pantallas apagadas durante 30 minutos


Este es el principal cambio que debes hacer en tu rutina diaria. Estamos tan conectados que lo primero que hacemos cuando nos despertamos es encender nuestros móviles como si estuviéramos poseídos para comprobar si nos hemos perdido algo importante durante el tiempo que hemos estado dormidos.


Si bien es cierto que es posible que tengas que responder a algún correo electrónico importante a primera hora de la mañana, seguramente esto puedas hacerlo en pocos minutos, por lo que no hay ninguna razón por la que debas pasar un buen rato con el móvil.


Una vez te despiertes, pasa un rato, al menos media hora, sin encender ninguna pantalla. Esto te dará tiempo para pensar y organizarte el día antes de recibir un aluvión de información.


Lee


Una de las mejores formas de empezar el día es leyendo un libro sobre algo que te guste.


Si le dedicas una hora al día a la lectura, posiblemente puedas leerte un libro a la semana. La lectura es una gran forma de empezar la mañana debido a que fortalece la mente. En lugar de arrastrar el dedo por las redes sociales y ver las noticias y toneladas de anuncios, empiezas el día alimentando tu mente, no destruyéndola.


La lectura es un gran relajante, y es una forma simplemente fantástica de empezar el día.


Medita


Meditar puede ayudarte a prepararte para el día que te espera. No tienes por qué sentarte a meditar, sino que es algo que puedes hacer por ejemplo mientras das un paseo tú solo o con otra persona.


Encontrar algo que te calme a primera hora te ayudará durante horas y horas. La meditación es definitivamente algo que debes probar.


Bebe té verde


Por supuesto, puedes tomarte un café, sin embargo, tomar un poco de té verde es una excelente forma de empezar el día debido a todas las propiedades de esta bebida. Se trata de una bebida realmente saludable, y una vez que empiezas a tomarla todos los días, al final acaba gustándote.


Sin embargo, debes tener en cuenta que el té verde tiene cafeína, así que no debes beber demasiado. Puedes tomar dos tazas por mañana como máximo.


Haz ejercicio


Seguramente esto es algo que hacías cuando eres más joven. Sin embargo, debes hacer todo lo posible por volver a incorporarlo en tu rutina diaria.


Aunque creas que no tienes tiempo, seguro que encuentras un hueco. ¿Tienes perros? Mata dos pájaros de un tiro y sácalos por la mañana a correr contigo.


Puedes hacer cualquier tipo de ejercicio que quieras. ¿Prefieres ir al gimnasio? Hazlo. ¿Te gusta más nadar? Apúntate a la piscina municipal. Hagas lo que hagas, intenta hacerlo por la mañana, ya que esto te beneficiará el resto del día en más de un sentido. El ejercicio es lo primero que te mantendrá en forma física y mentalmente. ¡Te motivará para ser más productivo el resto de la mañana y durante todo el día!


Date una ducha y ponte ropa limpia


Lo más probable es que si trabajas desde casa tengas la tentación de pasarte el día entero con el pijama puesto. Sin embargo, esto es algo que puede afectar a tu productividad de forma negativa. Por el contrario, si deseas empezar el día con energía, independientemente de si vas a salir o no, lo primero que debes hacer es darte una ducha y ponerte ropa limpia.


Ducharte y ponerte ropa limpia te dice que estás aquí, que estás presente, y que vas a pasar el día de la mejor manera posible. Te presentas por ti mismo, no holgazaneando en tu pijama durante horas y horas.


Escribe durante cinco minutos seguidos


Escribir es una actividad realmente terapéutica. Puedes dejar tus pensamientos, puedes trabajar tus ideas, te permite ser tan creativo como quieras ser.


No importa lo que escribas. Puedes anotar el sueño que has tenido durante la noche anterior o esbozar una lista de las cosas que te gustaría hacer durante el día. Escribir no es más que una forma de anotar ideas. Ni siquiera tienes que leer lo que has escrito una vez hayas acabado. Guarda el cuaderno, y luego tal vez por la noche puedes volver a abrirlo y leer lo que has escrito.


Acurrúcate con tus mascotas


Si tienes mascota, puedes hacer muchas más cosas con esta que darle de comer y salir a pasearla. Por ejemplo, si tienes perro, ¿por qué no pasar los primeros minutos de la mañana tumbado junto a él? Los perros son generalmente unos animales bastante cariñosos, por lo que ¿por qué no disfrutar de este cariño antes siquiera de salir de la cama?


Tómate primero el postre


Estamos programados para comer determinado tipo de cosas para el desayuno, para el almuerzo y para la cena. Y por supuesto, estás programado para guardar tu dulce favorito para el final del día. Cómo despejar tu mente con una rutina matutina de 10 minutos Comer un poco de ese chocolate que tanto te gusta después de cenar es fantástico. Sin embargo, hacerlo por la mañana es mucho mejor. Esto no significa que debas atiborrarte de dulce por las mañanas, pero si hay alguna cosa que realmente te gusta, ¿por qué no tomar un poco por la mañana y empezar el día lleno de alegría y energía?


Haz lo que mejor te funcione


No sientas la obligación de intentar todas estas cosas que hemos mencionado. No cabe duda de que podrías intentarlo, pero lo más seguro es que acabes abrumado. En su lugar, elige tres o cuatro de estas e intenta al menos una de ellas cada mañana. Prueba una durante unos días, y luego cambia a otra cosa si quieres. También puedes mezclar dos o tres y comprobar cómo te sientes.


Actualidad Laboral / Con información de Ihodl