17-07-2017
Miles de personas marcharon el domingo hacia el Congreso dominicano para exigir que el presidente Danilo Medina y dos exmandatarios sean investigados para determinar si están relacionado con los sobornos millonarios de la constructora brasileña Odebrecht y exigir cárcel para ellos y todos los beneficiarios de coimas.

“Existen claros indicios de responsabilidad de su gobierno en la licitación irregular y la sobrevaluación de (la termoeléctrica) Punta Catalina”, que construye Odebrecht, dijo la profesora María Teresa Cabrera, al leer ante miles de manifestantes los reclamos del movimiento denominado Marcha Verde.

El movimiento Marcha Verde surgió en enero, convocado por grupos de la sociedad civil, luego de que el departamento de Justicia estadounidense reveló que la empresa brasileña había pagado sobornos millonarios a funcionarios de varios países a cambio de contratos.

Desde su primera marcha masiva, celebrada en enero, la Marcha Verde exige una investigación independiente sobre los sobornos de Odebrecht y procesos judiciales en contra de los involucrados.

“Estamos aquí para que los políticos y millonarios sepan que la corrupción debe tener consecuencias”, dijo a The Associated Press Roqui Tavárez, un vendedor ambulante de 60 años que realizó el recorrido de varios kilómetros, portando una pancarta en la que exigía cárcel para Medina.

Tavárez, residente en el populoso barrio de Villas Agrícolas, explicó que sus ventas callejeras de utensilios de plástico han caído debido a que “todo el dinero lo coge un grupito en el gobierno, por eso no hay dinero en la calle.

La masiva presencia de manifestantes es una muestra de que la sociedad “está diciéndole no a la impunidad y no a la corrupción”, dijo el activista Juan Comprés, quien llegó desde temprano junto a cientos de personas de la norteña ciudad de Moca, para unirse a la marcha.

Los manifestantes se congregaron por la mañana en un céntrico crucero de la capital, desde donde comenzaron a caminar hacia la sede del poder legislativo. Vestidos con camisetas y gorras verdes en señal de esperanza, los manifestantes portaban pancartas en las que se leía “cárcel a los corruptos” o “fuera jueces políticos”.

La compañía brasileña confesó, según una investigación difundida por el departamento de Justicia estadounidense, que entre 2001 y 2014 pagó sobornos por 788 millones de dólares en 10 países de América Latina y dos de África para conseguir contratos con los gobiernos locales.

Actualidad Laboral / Con información de AP