Con la llegada de la pandemia el año pasado y la necesidad de digitalización acelerada se habló más sobre el emprendimiento, la innovación y la transformación digital. Al realizar una búsqueda de notas relacionadas a emprendimiento, es muy probable encontrarse con casos exitosos de empresas que iniciaron desde cero hasta convertirse en unicornios. Lamentablemente, la realidad de la mayoría de las historias relacionadas a este ecosistema no es así.
Gran parte de las startups fracasan por diversos factores como falta de capital, no lograr el ansiado product market fit, no alcanzar tracción de mercado al nivel esperado o simplemente un mal timing, entre otros. Cada uno puede imaginarse un desafío para iniciar una empresa, y seguramente, los emprendedores se han enfrentado al menos una vez a él.
Sin importar si es un emprendimiento que busca sus primeras ventas o una startup con operaciones en 5 países, nunca es fácil y hay maneras más sencillas y menos demandantes de ganarse la vida. El emprendedor es una persona que despierta admiración, pues a pesar de las adversidades y de estar en constante lucha contra lo tradicional, busca llevar su visión a la realidad. Su pasión lo define, aportar al mundo a través de un producto o servicio para solucionar el problema de alguien en algún lugar.
A continuación, se presentan cuatro de los principales retos y oportunidades a los que debe enfrentarse el emprendedor en un entorno cada vez más cambiante:
1- Liderazgo a distancia
Las medidas de distanciamiento social han implicado métodos de trabajo y, gestión de equipos que mantengan la sinergia y la impulsen a lo largo de la estructura organizacional. Hoy los líderes de startups deben abrir mayor espacio al crecimiento, empoderamiento y confianza de sus colaboradores.
2- Transformación digital
En las primeras cinco semanas de confinamiento, se digitalizó la sociedad y economías más que en los cinco años anteriores de acuerdo con el Pacto Digital de Telefónica Movistar. Sin importar el tamaño, las empresas se han dado cuenta de la necesidad de adoptar las nuevas tecnologías; y también, de implementar nuevas formas de trabajo flexibles e innovadoras como el teletrabajo y la atención al cliente off-site, para lograr rentabilidad e incluso para la supervivencia.
Las empresas digitales han crecido de forma considerable. En las últimas cifras publicadas por los gigantes tecnológicos estadounidenses GAFAM (Google, Apple, Facebook, Amazon y Microsoft) se observa un crecimiento de dos dígitos en sus ingresos, desafiando la crisis y paralización mundial.
3- Inversionistas corporativos
Los fondos de Venture Capital o inversionistas corporativos, también afrontan riesgos en su modelo de negocio en conjunto con el emprendedor. Y a pesar de que las condiciones económicas continúan apostando por ellos, de acuerdo con cifras de la Asociación para la Inversión de Capital Privado de América Latina (LAVCA), la captación de fondos aumentó 30% en el primer semestre de 2020, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Como ejemplo Wayra, ha invertido más de 49 millones de euros en startups y casi 500 millones de euros, han sido invertidos por terceros en las empresas de su cartera global de manera histórica.
La clave está en convencer al inversionista con la pasión por solucionar un problema, mediante un producto o servicio diferente a lo tradicional; por ser disruptivo en el mercado y marcar las tendencias que lo definirán.
4- Propuesta de valor
Considerada como la base del negocio, está en el propio corazón y ADN. Es indispensable que las startups conozcan el valor agregado de su producto, y sus elementos diferenciadores en el mercado; aquello que aporta, da valor y resuelve problemas a empresas y personas en diferentes localidades.
El 2020 presentó retos inesperados y sin duda, los primeros meses de 2021 no han sido diferentes. Entre los principales aprendizajes del momento excepcional que vivimos, se encuentra a las startups como protagonistas del cambio. Han dado respuesta a los desafíos, siendo grandes aliadas en momentos de adversidad e incertidumbre, gracias a su resiliencia, adaptación rápida y sus ganas de cambiar el mundo aportando lo último en tecnología.
Actualidad Laboral / Con información de Entrepreneur
