El 41% de las personas que trabajan en el gobierno federal mexicano no percibe un salario suficiente para adquirir la canasta básica, el 16% carece de seguridad social y el 25% trabaja sin un contrato estable, revela el “Cuarto Reporte del Observatorio de Trabajo Digno”, de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza. “Es inaceptable. Es profundamente indignante que el propio gobierno no esté dando condiciones de trabajo digna a sus trabajadores”, comentó María Ayala, coordinadora de investigación de la organización. Ayala explicó que con base a los datos de la Encuesta Nacional de ocupación y Empleo (ENOE) 2019 –con cifras del tercer trimestre–, no es posible saber en qué oficinas de gobierno se da principalmente esta situación.
En cuanto a la población general, los mismos resultados muestran que el 47% de quienes trabajan entre 49 y 56 horas, y el 49% de quienes trabajan más de 56 horas a la semana carecen de salario suficiente para adquirir la canasta básica. “Resulta totalmente revelador e indignante que personas con jornadas completas (40 a 48 horas a la semana) o incluso con jornadas excesivas (más de 48 horas); presenten indicadores tan altos de violación de sus derechos laborales y precarización de sus condiciones de trabajo”, señala el reporte.
Los sectores con mayor violación al derecho al trabajo digno son el sector primario, referido a la agricultura, ganadería, pesca y actividades similares, que incluyen a quienes trabajan en el hogar y en la industria de la construcción. En la industria restaurantera y hotelera, el 46% trabaja sin salario suficiente, 57% no tiene afiliación a Seguridad Social y el 67% trabajan sin contrato estable, se desprende de la misma información.
Los especialistas comentaron que hay una mejora en el indicador que mide, a quienes tienen trabajo asalariado y carecen de ingreso suficiente para adquirir la canasta básica para su familia; lo que tiene que ver con el incremento al salario mínimo, aunque consideraron que todavía no está al nivel de otros países, incluso de América Latina. Consideraron además, que el aumento al salario tiene que ser gradual para que al final del sexenio México llegue a los niveles de El Salvador, porque “es asunto de justicia (...). El salario mínimo es muy mínimo, estamos por debajo de Centroamérica, solo Honduras y Venezuela tienen salarios mínimos más mínimos (....). Es brutal lo que es el salario mínimo en México”, comentó Anaya.
Por su parte, Rogelio Gómez Hermosillo, Coordinador de Acción Ciudadana frente a la Pobreza, enumeró que Brasil, Chile, Uruguay, Perú y Panamá son países que cuentan con un salario mínimo para una familia. “Nosotros vamos por un salario mínimo de una familia por lo menos de cuatro, con dos preceptores de ingreso. Eso obliga que se llegue al doble”, expuso.
Actualidad Laboral / Con información de Expansión