04-04-2018
Francia vive hoy su segunda jornada consecutiva de huelga en la empresa pública de ferrocarriles, un movimiento masivo que afecta a millones de usuarios y que supone un desafío para el programa reformista del presidente Emmanuel Macron.
Apenas uno de cada siete trenes de alta velocidad (TGV) y uno de cada cinco trenes regionales operaban este miércoles, según las previsiones de la dirección de la empresa ferroviaria estatal (SNCF), que indicó que cerca del 30% de sus empleados participaban en la segunda jornada de huelga, un poco menos que la víspera.
Los sindicatos convocaron a un movimiento de huelgas intermitentes, a razón de dos días por semana, que debe durar en principio tres meses.
¿Por qué la huelga?
El primer ministro Edouard Philippe admitió el martes que las personas que usan la red ferroviaria SNCF - 4,5 millones de personas a diario - tienen "días difíciles por delante".
Macron, que asumió la presidencia en mayo con la voluntad de "transformar" Francia, ha logrado hasta ahora imponer sin gran resistencia sus reformas, incluida una polémica reforma laboral.
Pero esta vez se enfrenta a una tarea mucho más difícil al intentar reformar una empresa de 147.000 empleados que consiguió doblegar la voluntad reformista de varios gobiernos franceses en las últimas décadas.
Para justificar su reforma, el gobierno hace hincapié en la enorme deuda de la empresa pública, en la necesidad de prepararla para la próxima apertura a la competencia y sus importantes costes. "Hacer circular un tren en Francia cuesta un 30% más caro que en otras partes", repite el ejecutivo.
El presidente francés se juega parte de su credibilidad en este asunto. Aunque por el momento ha cedido el protagonismo a su gobierno, Macron no puede dar marcha atrás ante los ferroviarios después de haber acusado varias veces a sus predecesores de inmovilismo.
Otras protestas en Francia
En paralelo a la huelga ferroviaria, estudiantes universitarios manifestaban también su descontento este miércoles contra una ley que pretende modificar el acceso a la universidad, que según ellos crea un sistema de selección en los establecimientos públicos.
La facultad de Letras de la Universidad Sorbona (Paris-IV) estaba cerrada este miércoles debido a un bloqueo de estudiantes, un movimiento que se ha tomado ya varias universidades en Toulouse, Burdeos y Rouen.
El personal de Air France, los recolectores de basura y algunos trabajadores del sector energéticos también organizaron huelgas separadas el martes en una creciente atmósfera de descontento contra las reformas del gobierno.
Actualidad Laboral / Ver completo en AFP