En el mundo empresarial no todo es un camino de rosas. Hay que cometer errores en el camino del éxito para poder lograrlo. Ya que ningún humano es perfecto, lo importante después de cometer un error es aprender de él para no volver a caer en ninguno parecido. Aquí tenemos grandes errores de grandes empresarios de la historia.
Steve Jobs nunca se ha cortado a la hora de contar los errores que ha cometido a lo largo de su vida, muchas veces avergonzado pero nunca retraído. A pesar de haber cometido muchos errores en su controvertida carrera empresarial en el mundo tecnológico. El más grande fue contratar a la persona que después le hizo abandonar su propia empresa, John Sculley.
El error de
Mark Zuckerberg ha sido el que le ha llevado a ser millonario. Así que más que ser un error, fue un golpe de suerte. Mark tras un desengaño amoroso decide crear Facemash, una página para votar a la chica más sexy. Ahora cada vez que alguien quiere criticar al creador de Facebook se le recuerda su acto contra las mujeres mientras estudiaba en la Universidad. Harvard aún conserva la carta de disculpas que tuvo que escribir por coger las fotos de su base de datos y exponerlas al público.
El gran empresario
Richard Brandson cometió uno de los mayores errores de su vida con tan solo 19 años. Se dedicó a vender discos de música a través de listas de correo sin pagar impuestos. Por culpa de este comercio ilegal su madre tuvo que vender su casa para poder ayudarle con las fuertes multas que tuvo que pagar.
Bill Gates, prescindió de la publicidad en Internet Explorer. Creía que su navegador tenía todo lo que el usuario necesitaba, pero se dio cuenta de que no era así cuando nació el buscador Google. Ese fue el gran error del fundador de Microsoft.
Sam Walton, creador de Wal-Mart alquiló durante 5 años un local para su primer negocio. Cuando había convertido su tienda en un comercio de éxito, justo pasó el tiempo del alquiler y como no había incluido una cláusula en el contrato para la ampliación de plazo de arrendamiento, tuvo que abandonar el lugar. Aun así el empresario no se rindió y empezó de cero en Bentonville (Arkansas).
Actualidad Laboral / Con información de Forbes