Siempre es buen momento para iniciar a nuestros pequeños en el mundo de las finanzas. Fomentar la educación financiera en los niños puede parecer complicado desde el punto de vista adulto, a menos que agreguemos un toque de diversión. Por eso, aquí presentamos algunos juegos sencillos para que aprendan sobre manejo de dinero, y conceptos básicos como ingresos, gastos, presupuesto, inversión, ahorro y ganancia.
Primero, toma en cuenta estos consejos para inculcarles a los pequeños una cultura de finanzas sanas:
- Déjales claro de dónde viene el dinero que tienen mamá y papá
Desde muy pequeños, los niños pueden entender que los adultos deben trabajar para recibir dinero. Ya sea que este provenga de un salario como empleados o de ganancias, si son emprendedores.
- Enséñales cómo administran el dinero en casa
Una vez que saben de dónde viene el dinero (ingresos), toca explicarles que este sirve para cubrir las necesidades de la familia: alquiler o hipoteca, servicios, despensa y ropa; así como para darse algunos gustos, además de destinar una parte al ahorro familiar.
- Motívalos a ahorrar
A partir de cierta edad, la mayoría de los niños recibe una mesada por parte de sus padres. Además, algunos tienen otros ingresos, como el dinero que les da la abuela o los tíos, y las recompensas de 'el ratón' o 'el hada' de los dientes. Enséñales que, si bien pueden usarlo para darse un gusto inmediato (algún dulce o juguete pequeño); les conviene guardar una parte para alcanzar un objetivo mayor. Por ejemplo, una visita al parque de diversiones o un juguete más grande y costoso.
- Sé su ejemplo teniendo un buen manejo de tus finanzas personales
Recuerda que los niños aprenden de lo que ven, y esto incluye las finanzas personales. Si sus padres están siempre haciendo gastos impulsivos, con deudas o sin un peso en la bolsa a fin de mes; al crecer lo verán como algo normal y es muy probable, que lo repliquen. También es importante que te vean ahorrar, aunque sean cantidades mínimas, para reforzar el punto anterior.
Ahora, si quieres que tus pequeños se sumerjan de lleno en el manejo del dinero, considera practicar estos juegos sencillos:
1- Mi propio dinero
Ensénales físicamente el dinero y explícales todos los tipos de billetes y monedas que hay, su denominación y equivalencias. Luego, toma hojas de papel, lápices de colores, sellos, calcomanías, lapiceros o lo que tengan a la mano, e invítalos a crear sus propias monedas y billetes. Si bien pueden comprar un paquete de estos en cualquier librería o juguetería, el hecho de diseñarlos ellos mismos, les ayudará a procesar mejor su valor y hará más divertido usarlos en otros juegos.
2- Mi primer trabajo
Como dijimos, aunque los niños suelen recibir el dinero como un obsequio, es muy importante dejarles claro que hay que trabajar para ganarlo. Una forma de hacer esto es dándoles su primer ‘trabajo’, siempre acorde a su edad. Por ejemplo, si mamá está haciendo home office, puede contratar a su peque como ‘asistente’ para que la ayude con tareas sencillas: como poner hojas en la impresora, sacarle punta a los lápices o anotar pendientes y recordarle cuándo tiene junta virtual. Hagan un 'contrato' en el que especifiquen, la cantidad que recibirá al final de la semana por cumplir con dichas tareas.
Un punto vital es que el ‘trabajo’ no sea ninguna tarea doméstica que forme parte de las responsabilidades del niño, como guardar sus juguetes, acomodar su ropa, pasear al perro o lavar los trastes. Mucho menos contemples darle un ‘sueldo’, por sacar buenas calificaciones o hacer la tarea. Esto solo provocará que vea sus obligaciones como algo que se le debe premiar, y no como parte de la vida de un ser humano responsable, autónomo y funcional.
3- El supermercado
Si ya entendieron cómo se gana el dinero, es hora de enseñarles cómo se gasta. El juego del supermercado es de los favoritos entre los pequeños, pues desde siempre han visto a sus papás hacer el súper o comprar en una tienda. Saca algunos productos de tu despensa y acomódalos en una mesa como si fuera un mostrador. Ponles precio con etiquetas adhesivas y altérnense, para que uno venda y el otro compre. Con esto, le ayudarás a entender fácilmente conceptos como poder adquisitivo (¿para qué me alcanza?), transacciones (dinero a cambio de productos), ahorro (¿cuál es más barato?), comparar productos y tomar decisiones de compra.
4- El pequeño empresario
Los niños pueden captar algo tan complejo como el ciclo de producción, inversión, compra-venta y recuento de ganancias, si se lo presentas como un juego. Por ejemplo, si tienes la posibilidad de armar un huerto en casa, enséñalo a que cultive vegetales como lechuga, zanahorias y espinaca. Llegado el momento, cosechen lo sembrado y preparen ensaladas, mismas que podrá venderle a la familia o vecinos a un precio simbólico. Con el dinero obtenido, llévalo a comprar algo que desee mucho, para que aprenda a disfrutar sanamente el fruto de su esfuerzo.
Otra opción es que invierta el dinero comprando materias primas y elabore pulseras, figuras de foami o algún postre que pueda vender fácilmente. En ambos casos, el niño o niña aprenderá que ser empleado no es el único camino para generar ingresos, sino que también puede hacerlo produciendo artículos de consumo o invirtiendo para obtener ganancias.
5- Alimenta al cochinito
Las alcancías son un artículo indispensable para todo niño. Si bien se pueden encontrar en una gran variedad de formas, las que más convienen para este juego son aquellas con figura de animales. La idea es regalarle al peque una alcancía en forma de cochinito, gato, perro o cualquier animalito que necesite ‘comer’. Entonces, el niño tendrá la responsabilidad de ‘alimentar’ su alcancía con moneditas o billetes cada vez que pueda; ya sea una vez al día, cada tercer día o semanalmente. El pequeño anotará en un calendario la cantidad ingresada y así sabrá con exactitud, cuánto dinero tiene o si necesita 'darle de comer' más seguido.
Como marca la tradición, cuando su alcancía se llene podrá sacar sus ahorros. Puede gastarlos en alguna meta que se haya propuesto, invertirlos en un pequeño negocio o meterlos a una cuenta de ahorro que le genere rendimientos. Si los niños son un poco más grandes y ya dominan lo básico, un excelente refuerzo para su educación financiera son los juegos de mesa como Monopoly, Turista, Catan Junior, Ratland o Cashflow.
Estos son algunos ejemplos de juegos sencillos que se pueden implementar en casa sin gran esfuerzo. Con ellos, los motivaremos para que aprendan lo básico de economía y en el futuro tomen mejores decisiones.
Actualidad Laboral / Con información de Entrepreneur