29-08-2022
Hasta el 2021, 53% de las empresas nunca habían solicitado un financiamiento desde el inicio de sus operaciones. Lo que representa un reto para el sistema financiero nacional. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Financiamiento de las Empresas (Enafin) 2021 del Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía). Hecha en colaboración con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), el principal motivo que señaló el 34% de las empresas, fue que son autosuficientes o cuentan con otros medios. Un 29% indicó que no le interesa y 18% mencionó que, no ha buscado un crédito por el alto costo.
La presidenta del Inegi, Graciela Márquez Colín, indicó que esto representa una gran oportunidad. Pues el financiamiento a empresas es uno de los factores, que potencia la capacidad productiva de las empresas. Lo que a su vez promueve el crecimiento y desarrollo económico del país. Entre los factores que las empresas consideran que limitan mucho su acceso al financiamiento, los de mayor frecuencia fueron una tasa de interés alta, con 62%; que son muchos los requisitos solicitados, con 39%, y la cantidad y dificultad de los trámites, con 33%.
De las empresas, 95% conocía o escuchó hablar de la banca comercial, y 51% sobre la banca de desarrollo. Menos del 40% de las empresas conocía las entidades del sector popular, como las Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (SOCAP) o las Sociedades Financieras Populares (SOFIPO).
El subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, dijo que la información de la Enafin resulta relevante para la elaboración de políticas públicas en tres ejes principales: en materia regulatoria, en el diseño e implementación de programas de acceso al financiamiento desde el gobierno. Y para promover el fortalecimiento de capacidades económico-financieras de las empresas. “La Enafin 2022 muestra que en el tema de financiamiento a empresas, hemos logrado bases sustanciales como la digitalización de los servicios financieros. Ya que la pandemia aceleró la adopción de tecnologías. Sin embargo, aún existen retos significativos de acceso a financiamiento, que debemos resolver”, refirió Yorio.
Respecto al impacto de la pandemia, la Enafin muestra que 3 de cada 10 empresas renegociaron o aplazaron los pagos a proveedores. 14% pidió créditos a conocidos, y 10% solicitó un nuevo financiamiento a instituciones financieras. El cierre de sucursales financieras lo sufrió 23% de las empresas y solo 13%, reportó experimentar aumento en costos y comisiones de sus productos financieros.
Actualidad Laboral / Con información de Forbes México