¿Sientes que a tu empresa o proyecto le hace falta algo? Con el tiempo, van cambiando nuestros gustos e intereses, y eso también influye en la manera en la que visibilizamos nuestro negocio. Si estás buscando hacerle un refrescamiento o, darle algo de vida, te dejamos 6 tips para lograrlo:
1- Dinamiza y rejuvenece la plantilla
Los trabajadores son el principal activo para reavivar este campo. Una idea consiste en diseñar un espacio en la Intranet donde, los empleados voten a sus compañeros a partir de valores, como la capacidad de liderazgo o la motivación. Con estos datos puedes detectar el talento o a los auténticos líderes en los equipos. Y también permite, identificar las carencias y las parcelas que has de reforzar en la plantilla. La rotación constituye otra fórmula dinamizadora. Se trataría de dar más responsabilidades al trabajador o que estrechase la relación con otros ámbitos de la organización.
2- Mejora la formación de los empleados
Antes que contratar o rejuvenecer a la plantilla, muchas compañías forman a sus equipos, con el fin de que adquieran las nuevas capacidades que pide el negocio. Un método es la denominada técnica del espejo, en la que se aprovecha la actividad cotidiana de los empleados. Así, ubicaras a una persona joven con otra veterana, para que trabajen conjuntamente, de modo que el intercambio de ideas y experiencias les enriquezcan.
¿Coste de la iniciativa? Monetariamente ninguno. Igual que el desarrollo de un Wiki interno, a través del cual los trabajadores vuelquen sus conocimientos y experiencias, una información a la que todos tienen acceso y que cada cual empleará según sus necesidades. Este es también un modo de autogestionar la formación que también es gratis. Y es que, no por invertir más dinero, la formación es más eficaz.
3- Facebook, el celular...explora nuevos canales de venta
Es el momento de explorar cualquier nueva vía. ¿Por qué no vender en Facebook, donde te esperan 500 millones de personas? Esta es una tendencia que empieza a asomar. De hecho, ya existen firmas que integran una tienda online ya operativa en esta red social, con lo que los usuarios podrán adquirir sus productos o comentar las compras con sus contactos. Otra opción es subirse al carro de los dispositivos móviles. Adapta tu oferta comercial –y tu web- para vender a través del teléfono.
4- Cambia la decoración de tu local
Al plantear una posible reforma, no dudes en preguntar a los usuarios sobre la decoración, la fragancia del local, el hilo musical que consideren más adecuado… Hoy impera en esta parcela una mayor interactividad con el público. Al recabar estas impresiones –y aplicar alguna de ellas– dotaras a la tienda de una personalidad propia. Y, no olvides que esta información contiene un elevado valor, ya que el cliente suele ser más crítico y claro al hablar de los aspectos materiales y más visibles.
Una pista para seguir la dirección correcta. Las tendencias son muy cambiantes pero, en cualquier caso, suelen mirar a la moda del vestir y hogar. Y otro condicionante tiene que ver con el sector donde nos movamos. En una tienda de moda, por ejemplo, es vital el mostrador y los probadores. Aporta un poco de diseño en estos elementos.
5- Dale una vuelta a tu plan de negocio
Para ello, puedes pedir ayuda a personas que estén en el entorno de tu empresa. Invita a actores externos, un cliente importante, un proveedor… gente que te aporte una visión distinta de la actividad desde fuera. Dicen los expertos que el momento de revisarlo está en función de la actividad. En Internet no lo puedes guardar en el cajón durante un lustro, sino que quizás debas analizarlo a los seis meses o al año. Una o dos veces por ejercicio, podríamos reflexionar acerca de la dirección que estamos tomando. No obstante, en los sectores con alto crecimiento, la oportunidad se puede esfumar si sigues el plan con exceso celo.
6- Actualiza tu logotipo
Cada cinco años, es imprescindible que se replanteen su imagen corporativa y, a partir de ahí, ver qué elementos modificar. Referido al logo, tampoco hay que realizar cambios drásticos. La sencillez ha de prevalecer en la imagen, pues lo simple se asimila mejor. No te compliques. Introduce leves modificaciones en el logotipo, con un sombreado, una tonalidad ligeramente diferente, un matiz en el color; también dependerá un poco de tu presupuesto y qué tantos requerimientos tengas.
Actualidad Laboral / Con información de Emprendedores