No son pocos los deportistas que levantan sus propias empresas o ejecutivos que practican una que otra disciplina. Pero más allá de esto, "en el deporte como en los negocios, la clave está en maximizar las fortalezas y establecer las estrategias de defensa para contrarrestar sus debilidades. De esta manera se logra desarrollar el máximo potencial, porque en los emprendimientos como en el deporte, se gana o se pierde, sin término medio", dice Murilo Arruda, director en DNA Human Capital.
Estas son algunas similitudes básicas entre los atletas de alto rendimiento y empresarios de éxito:
Pasión. La mayoría de los empresarios son impulsados por la pasión por su negocio. Es esta fuerza la que los mantiene trabajando hasta altas horas de la madrugada, sin fines de semana ni vacaciones. Al igual que el atleta, que abandona todo para entrenar y alcanzar su máximo potencial.
Tenacidad. Cuando todo va bien, es fácil ser un emprendedor. Pero el verdadero empresario sigue insistiendo incluso cuando las cosas son difíciles, a menudo se niega a aceptar la derrota en la búsqueda de soluciones. La misma tenacidad que debe tener un atleta para terminar un triatlón.
Confianza en sí mismo. Los emprendedores son mucho más propensos a tomar riesgos, sólo por el hecho de estar convencidos de sus capacidades y que obtendrán buenos resultados.
Tolerancia a la frustración. Da miedo tomar riesgos, iniciar un nuevo negocio, apostar todo lo que se tiene en un proyecto. El emprendedor debe ser capaz de usar ese miedo como propulsor, así como un futbolista que puede tener miedo de preparase durante cuatro años y lesionarse justo antes del mundial.
Visión. Visualizar el camino al éxito es una característica indispensable del emprendedor. Al igual que el deportista que mentaliza antes de cada juego, la imagen de la victoria y el resultado del juego, el emprendedor debe ser capaz de visualizar lo que quiere lograr para tener clara cuál es su meta a seguir.
Flexibilidad. El ser capaz de hacer cambios, adaptarse a las circunstancias y asumir nuevas responsabilidades y más trabajo, son características esenciales de un emprendedor y un deportista.
Romper las reglas y los límites. El emprendedor al igual que el deportista debe desafiar los límites y las reglas establecidas, sólo de esa forma se logrará alcanzar lo que parecía imposible.
Actualidad Laboral / Con información de América Economía