Un trabajo tóxico puede afectar tu salud de muchas maneras diferentes. De acuerdo a un estudio publicado por el Hufftington Post US, aunque no lo parezca, tu cuerpo paga un precio muy alto por todos los “días malos en la oficina”. Y es que, de acuerdo con estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), además de afectar gravemente tu salud, estas enfermedades generan pérdidas anuales equivalentes al 4% del Producto Interno Bruto (PIB) global y, por lo menos en Estados Unidos, causan 120,000 muertes al año, según una investigación de Jeffrey Pfeffer, profesor de comportamiento organizacional en Stanford. Esta cifra supone casi el 67% más de las personas que sufren diabetes en ese país.
La buena noticia es que esto puede prevenirse antes de que sea demasiado tarde: Hay ciertos "focos rojos" que tu cuerpo envía (y a los que debes de poner principal atención) antes de que se conviertan en males crónicos e irreversibles. A continuación te contamos 8 de las señales que te puede dar tu cuerpo sobre ese trabajo tóxico que tienes:
1- No puedes dormir
Si eres de los que se despierta a medianoche pensando en tus tareas pendientes del día siguiente o todo lo que sueñas está relacionado con tu trabajo, es una señal de que algo no está bien.
2- Dolores de cabeza frecuentes
Los músculos se tensan para proteger a tu cuerpo de lesiones. Cuando tu cuerpo asocia tu lugar de trabajo como una zona de peligro, mantiene los músculos del cuello, hombros y cabeza tensos, mismos que se asocian con migrañas y dolores de cabeza seguidos.
3- Dolor muscular generalizado
Los síntomas psicosomáticos son la clara representación de que el estrés se manifiesta como dolor físico.
4- Tu salud mental empeora
Estás de mal humor todo el tiempo y tus problemas en el trabajo te acompañan a casa, todos tus correos son de “solo seguimiento”, y constantemente temes encontrarte a tu jefe, comes en exceso o te sientes deprimido sin razón aparente en tu oficina.
5- Te enfermas más seguido
Si la gripe es un huésped frecuente en tu vida o padeces constantemente de gastritis o colitis, sufres de indigestión o estreñimiento, es importante que sepas que el estrés crónico compromete tu sistema inmunológico, haciéndolo más susceptible a las bacterias que causan estas enfermedades.
6- Pierdes interés en el sexo
La Asociación Americana de Psicología señala que cuando las mujeres tienen que hacer malabarismos para balancear el estrés profesional con sus asuntos personales, su deseo sexual se ve disminuido. Mientras que para los hombres, este estrés crónico puede resultar en una menor producción de testosterona, lo que a su vez se traduce en una menor líbido.
7- Síndrome de burnout o fatiga
Estás cansado todo el tiempo y no puedes dejar de bostezar, ya es algo que ninguna siesta larga ni fin de semana parece curar porque, en pocas palabras, “te sientes abrumado porque trabajas demasiado y trabajas demasiado porque te sientes abrumado”.
8- Tu apetito cambia
De acuerdo con la Carta de Salud de Harvard, bajo estrés agudo, tu cerebro ordena a tu cuerpo suprimir la digestión para enfocarse en cuidarse o salvarse de un peligro.
¿Qué puedes hacer para combatir esto?
Tomar pequeños descansos o ‘breaks’ fuera del lugar de trabajo, meditar y hacer ejercicio son algunas de las recomendaciones de Pfeffer que pueden ayudar a compensar los síntomas del estrés. Si bien es cierto que por presiones económicas o personales, es difícil dejar el lugar de trabajo, es posible concentrarse en la situación y cambiar la perspectiva que tienes sobre el mismo. No obstante, si tu situación es crítica, usa estas advertencias como lo que necesitas para buscar un nuevo empleo, renuncia.
Actualidad Laboral / Con información de Forbes México