Cerrar las brechas de género requiere de políticas desde los ámbitos público y privado, encaminadas a lograr condiciones óptimas para que las mujeres entren, permanezcan y crezcan en el mercado laboral. Los bajos niveles de participación femenina en el trabajo remunerado y el espíritu empresarial, representan una gran pérdida de productividad; y, por lo tanto, una merma en el Producto Interno Bruto (PIB) de cada país.

Ante esto, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) recomienda 9 acciones para alcanzar la igualdad de género en el campo laboral:

1- Avanzar hacia un Sistema Nacional de Cuidados asequible y de calidad: Un Sistema Nacional de Cuidados es necesario para reduciría la carga desproporcionada, de las tareas de cuidado que recae en las mujeres y apoyar su desarrollo profesional.

2- Impulsar la corresponsabilidad en los hogares: Sin igualdad en el hogar, difícilmente se logrará igualdad en el mercado laboral. Por ello, es necesario avanzar hacia una licencia de paternidad, la cual sea obligatoria, intransferible y financiada por el Estado.

3- Promover alternativas de educación flexible para mujeres: Mayor nivel de escolaridad aumenta la probabilidad de acceder a empleos formales y con mayores ingresos. Existen opciones de educación flexibles para que las mujeres, adquieran las habilidades que el mercado laboral demanda.



4- Generar información con perspectiva de género: Los datos con perspectiva de género son fundamentales para identificar y atender, las necesidades diferenciadas que tienen mujeres y hombres.

5- Medir y visibilizar las brechas de género de las instituciones federales: Esto es fundamental para diseñar políticas basadas en evidencia, que impulsen el crecimiento de las mujeres dentro de la administración pública.

6- Transparentar datos con perspectiva de género: Participar en plataformas e iniciativas de transparencia de datos con perspectiva de género, puede ayudar a replicar mejores prácticas de equidad en el sector privado.



7- Realizar autodiagnósticos para medir brechas de género: Los autodiagnósticos son una herramienta útil para las organizaciones. Con el objetivo de identificar las barreras que enfrentan las mujeres, para crecer en los distintos niveles jerárquicos y las áreas de oportunidad donde pueden incidir.

8- Impulsar políticas de integración vida-trabajo: Las políticas que permiten un balance entre las responsabilidades laborales y personales, son necesarias para mejorar la calidad de vida de las trabajadoras.

9- Ampliar los permisos de paternidad: Las organizaciones pueden ampliar este beneficio al que tienen derecho los trabajadores y ser un referente para otras empresas.

Actualidad Laboral / Con información de Forbes México