La actividad empresarial de la zona euro volvió a crecer modestamente en julio tras el levantamiento de algunas de las restricciones impuestas para detener la propagación del coronavirus, pero el repunte del importante sector servicios no fue tan agudo como se esperaba, según mostró una encuesta.
Se ha diagnosticado el virus a más de 18 millones de personas en todo el mundo, pero ante los indicios de que la pandemia estaba empezando a ser contenida en gran parte de Europa, los Gobiernos han permitido que más empresas retomen su actividad.
La economía del bloque registró una contracción récord del 12,1% el pasado trimestre, según datos publicados el viernes, mientras que una encuesta de Reuters de julio preveía un crecimiento del 8,1% para el presente trimestre, a medida que las empresas empiezan a volver a la normalidad.
El último índice compuesto de gerentes de compras (PMI, por sus siglas en inglés) de IHS Markit, considerado un buen indicador de la salud económica, rebotó a 54,9 en julio desde la lectura de 48,5 de junio, mejor que la lectura adelantada previamente de 54,8. La cifra había permanecido por debajo de los 50 puntos que separan el crecimiento de la contracción durante cuatro meses.
“La actividad comercial del sector servicios de la zona euro se expandió en julio a un ritmo no superado en más de dos años”, dijo Chris Williamson, economista de IHS Markit.
“Francia y Alemania experimentaron incrementos especialmente fuertes, aunque también se observó un nuevo crecimiento en España e Italia, ya que las medidas de confinamiento por la COVID-19 continuaron relajándose”, añadió.
La demanda general y el optimismo mejoraron, pero las empresas volvieron a recortar drásticamente sus plantillas, lo que probablemente supondrá un motivo de preocupación para los dirigentes económicos. El índice de empleo se mantuvo por debajo de la marca de referencia en 46,5 puntos, aunque mejor que la lectura de 43,2 de junio.
Con la ciudadanía aventurándose a salir a bares y restaurantes tras el confinamiento, el PMI del sector servicios subió a 54,7 desde la anterior lectura de 48,3, su nivel más alto desde septiembre de 2018 pero inferior a la lectura adelantada de 55,1.
Aunque los directivos se mostraron más optimistas sobre el año que viene, el índice de expectativas de negocio del sector servicios quedó por debajo de la media a largo plazo en la que se ha estado moviendo el indicador (59,4 puntos), aunque por encima de los 56,7 de junio.
“Los números de infectados con el virus determinarán principalmente si la recuperación económica puede sostenerse, y los indicios recientes de nuevos brotes representan un riesgo, especialmente para muchas áreas del sector servicios, como los viajes, el turismo y la hospitalidad”, dijo Williamson.
Actualidad Laboral / Con información de Reuters
