Alrededor del 90% de las pequeñas empresas estadounidenses que recibieron ayudas, para mantenerse a flote durante la crisis de la covid-19 las han agotado ya; aseguró este martes el consejero delegado de Goldman Sachs, David Solomon. En una entrevista con el canal CNBC, Solomon destacó las necesidades de estos negocios, con "más de la mitad" obligados a despedir empleados y limitar sus actividades.
Los datos de Goldman Sachs proceden de una encuesta, que la entidad ha llevado a cabo entre los miles de participantes en un programa para apoyo a pequeñas empresas que patrocina. "Este es un motor gigantesco de empleo para la economía, y está sufriendo ahora mismo", destacó Solomon; que subrayó que las pequeñas y medianas empresas necesitan "liquidez".
Tras varios meses de bloqueo, los legisladores demócratas y republicanos parecen haber avanzado hacia un posible compromiso para aprobar un nuevo paquete de ayudas. Con una propuesta de miembros de ambos partidos, para sacar adelante un estímulo de unos 750.000 millones de dólares. La iniciativa se centraría en los programas que generan más consenso, entre los que figuran los créditos a las pequeñas empresas y un refuerzo de las ayudas por desempleo; mientras que dejaría de lado, cuestiones que dividen a los dos partidos y que hasta ahora han impedido un acuerdo.
Buffet defiende más ayudas
El inversor Warren Buffett también reclamó este martes al Congreso, apoyo para las pequeñas empresas en otra entrevista con CNBC, en la que aseguró que la situación es de "guerra" para este colectivo. "Creo que el país se lo debe a los millones de pequeños empresarios", dijo Buffett. Que también urgió a renovar el programa de créditos que se puso en marcha, al inicio de la pandemia para que estos negocios puedan superar los próximos meses.
Las expectativas de que este nuevo estímulo pueda aprobarse en los próximos días ayudaban este martes a Wall Street, también beneficiado por el inicio de las vacunaciones contra el coronavirus.
Actualidad Laboral / Con información de El Economista