09-06-2016
“Qué fácil es para Nicolás Maduro, aumentar el salario mínimo, ajustar las Unidades Tributarias del ticket de alimentación y no transferir un centavo”, expresó el Alcalde del municipio El Hatillo, del estado Miranda, David Smolansky. El mandatario local salió, este jueves, desde temprano de su Despacho, acompañado por los trabajadores hacia la Vicepresidencia Ejecutiva de la República, a exigir los recursos para el pago del ajuste decretado por el Presidente Nicolás Maduro.
Sin embargo, efectivos de la Guardia Nacional (GN) impidieron el paso de los autobuses que los movilizaban desde el sureste hasta el centro de la ciudad, para una reunión que, según dijo, estaba pautada con el Vicepresidente Aristóbulo Istúriz, al mediodía. “Nos bajaron de los autobuses como si fuésemos unos delincuentes”, dijo, pero siguieron a pie por la autopista de Prados del Este.
Tres horas más tarde, ya en el centro, un contingente de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y GN los obligó de nuevo a bajarse de otros autobuses, y continuaron en una marcha, por las aceras, pero otro cerco de seguridad no les permitió acercarse a la institución del Estado.





Esa alcaldía necesita 360 millones de bolívares para cubrir los pagos de sueldos y salarios de los empleados y obreros, “apenas nos han transferido 20 millones, lo que es mucho menos del 10%, es decir, son migajas”. Con estos recursos serían para cancelar lo que corresponde a los dos últimos aumentos al salario mínimo nacional y del bono de alimentación, decretados en marzo y mayo de este año.


Actualidad Laboral / ASS