Amazon acaba de dar el primer paso de su expansión en los países nórdicos, con el lanzamiento de su servicio de comercio electrónico en Suecia. Hacía años que se especulaba sobre el desembarco del gigante estadounidense en el país escandinavo, el de mayor tamaño de la región; algo que se confirmó en verano, cuando también se hizo pública la compra de un almacén en Eskilstuna, a unos 100 kilómetros al oeste de Estocolmo, capital sueca.
Los clientes suecos podían hasta ahora, comprar en Amazon a través del Reino Unido o Alemania; pero con altos costes de envío y una selección limitada de productos. Ahora el servicio ha llegado al país, que podría ser el primer paso para expandirse luego al resto de la región nórdica. Aunque ha llegado algo cojo. Por ejemplo, no existe la opción de suscribirse al programa de fidelidad Prime, ya que la compañía no puede garantizar la entrega al día siguiente, debido a que muchos productos proceden de almacenes ubicados en otros países, como España o Alemania.
Comercio electrónico
Según informó la empresa, el portal Amazon.se ofrece más de 150 millones de productos, entre ellos miles de marcas suecas. Sin embargo, varios analistas han resaltado la poca presencia de marcas locales. “No parece un lanzamiento muy ambicioso”, dijo al periódico Dagens Nyheter el consejero delegado de la consultora HUI, Jonas Arnberg; que consideró que la oferta general, “no parece estar muy adaptada” al mercado sueco.
El vicepresidente de Expansión Europea de Amazon, Alex Ootes, admitió que la intención es ir atrayendo cada vez más marcas nacionales. “Seguiremos trabajando duro para ganarnos la confianza de los clientes suecos”, aseveró. Y afirmó que la intención es ir llenando el almacén ubicado en Eskilstuna, con los best sellers en Suecia para poder hacer entregas en un día en el futuro; sin aventurarse a predecir cuándo. Teniendo en cuenta también, la dificultad de prestar este servicio, en un país con una población muy diseminada en una gran extensión.
Lo que más atención atrajo el día del lanzamiento la semana pasada, sobre todo en redes sociales, fueron errores como el uso de la bandera argentina en lugar de la sueca. Y la torpe traducción automática de algunos productos del inglés al sueco, que degeneraron en términos desafortunados y ofensivos.
Aunque no existe el programa Prime, Amazon ofrece una entrega gratuita en compras superiores a 229 coronas (22 euros); algo que puede tener cierto impacto, ya que las entregas sin coste son inusuales en el comercio electrónico sueco. Aun así, analistas y medios suecos coinciden en que Amazon, lo tendrá mucho más difícil que en otros países, para hacerse hueco en el comercio electrónico sueco; ya que hay muchos competidores bien posicionados, y prevén que no llegará a conseguir una cuota de mercado equivalente a otros países europeos. “Es diferente entrar en Suecia en el 2020 que hace 20 años en Alemania y Gran Bretaña”, afirmó a la agencia de noticias TT Daniel Schmidt, analista de Danske Bank.
La ausencia de un gigante como Amazon durante las primeras décadas de expansión del comercio electrónico, ha permitido el surgimiento y consolidación de competidores nacionales, que ya están muy bien posicionados. Suecia es el mercado más maduro en comercio electrónico en la región nórdica; en términos de número de personas que compran, habitualmente, a través de internet. El año pasado fue un 70%, mientras que en el 2008 era el 20%, según Postnord, la empresa postal de Suecia y Dinamarca. El año pasado, los suecos gastaron 95.000 millones de coronas (más de 9.000 millones de euros).
Actualidad Laboral / Con información de La Vanguardia