Los emprendedores consideran que su prosperidad y desarrollo depende de lo que ellos mismos hagan.  Este es parte de los resultados del estudio “De la Inclusión a la Prosperidad. Una Visión que Cambia Vidas”, publicado por la Fundación Bangente para la Economía Popular y adelantado por Virginia Soto Sira y Marisela Hernández.

Se trata de una investigación de tipo cualitativo aplicada a 21 clientes de Bangente y  dirigida a conocer la percepción y  definición de estos emprendedores acerca de la prosperidad, con la idea de dar los primeros pasos para generar indicadores cuantitativos que permitan medir la prosperidad en sus diversas dimensiones.

Una de las conclusiones de este estudio es que estos emprendedores no sólo perciben la prosperidad como mejores condiciones económicas, también la experimentan a través del respeto que hacia ellos sienten otros miembros de su comunidad y a través de la satisfacción que les produce haber logrado este desarrollo con esfuerzo propio.

Otro de los resultados de esta investigación es que uno de los principales estímulos que tuvieron para progresar los emprendedores entrevistados, fueron sus hijos y el deseo de que pudiesen tener mejor calidad de vida que sus padres a través de la educación y la protección.

De la investigación también se desprende que en general, enfrentar una situación “límite”, como la pérdida de un ser querido o unas condiciones económicas muy precarias condujeron a estas personas a buscar cambiar su realidad.

“Aquí lo que estamos dando es una cantidad de claves que describen cómo evolucionan las personas y qué cosas son definitivamente importantes para esa evolución”, afirma Virgina Soto, Gerente de Responsabilidad Social de Bangente.

Este mes fue presentado el resultado de este estudio a profesores e investigadores del Instituto de Estudios Superiores en Administración (IESA).

“Nuestra idea de acercarnos a la academia tiene varias aristas, una es que nos provean de capital humano y de conocimiento para enriquecer mucho más las investigaciones que podemos hacer, y además hacerlo con mayor variabilidad, de manera que sean mas generalizables todavía. La segunda intención que yo creo que es muy significativa es que debe tener un impacto sobre el tema académico también, ¿Cómo estamos formando a esos emprendedores? A lo mejor nosotros estamos pensando siempre en el tema de cómo hace un plan de negocios, pero a lo mejor por ahí no empieza, a lo mejor lo que podríamos empezar a trabajar son cosas, quizá más blandas de la gente que los ayudaría”, sostiene Soto.

Aramis Rodríguez, coordinador del Centro de Emprendedores del IESA, considera que esta investigación podría ser el inicio del la unión del esfuerzo de académicos y de algunas instituciones para investigar aspectos relacionados con el emprendimiento informal. “Empieza de alguna manera a clasificar o a definir lo que es un emprendedor popular o informal y a dejar algunas ideas de cuáles pueden ser las palancas que los mueven a ellos”, dice.

El resultado de este estudio ha conducido a los profesores del Centro de Emprendedores del IESA a considerar algunas líneas de estudio que podrían desarrollar a partir del próximo año, como por ejemplo, determinar las categorías de emprendedores informales que existen en el país. “Ellos tienen mucha data, nosotros lo que tenemos es metodología. Nosotros queríamos de alguna forma generar algún tipo de conocimiento para ir divulgando ese conocimiento no sólo en Venezuela, sino (también) en revistas de investigación afuera”, afirmó Rodríguez.

El profesor del IESA expresó que la idea es generalizar el resultado de las investigaciones que se adelanten en esta materia. “El producto final no va a ser un producto de un banco, va a ser un producto de una institución académica con un conjunto de aliados académicos también porque estamos tratando de integrar a otros profesores”, sostiene Rodríguez.

La Gerente de Responsabilidad Social de Bangente, afirmó que quienes representan a esta institución aspiran a que el trabajo en conjunto con los académicos también permita determinar cómo podría impactar sobre las políticas públicas, el resultado de estos estudios acerca del emprendimiento informal.

A partir de 2015 esta institución financiera y el IESA darán inicio a una alianza que han establecido para dictar una cátedra de emprendimiento popular.

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