El número de personas que solicitó prestaciones por desempleo aumentó bruscamente a 965.000 la semana pasada, la cifra más alta desde fines de agosto y prueba de que el nuevo pico del coronavirus ha provocado un aumento de los despidos.
Las cifras difundidas el jueves por el Departamento de Trabajo permanecen en niveles nunca vistos antes de la pandemia. Previamente, la cifra semanal típica de solicitudes era de unos 225.000. A mediados del año pasado, cuando se decretaron las cuarentenas nacionales, las solicitudes de prestaciones por desempleo aumentaron a casi 7 millones, 10 veces el récord anterior. Aunque bajaron luego, permanecen por encima de 700.000 desde septiembre.
La elevada tasa de despidos coincide con una economía debilitada a medida que los consumidores evitan viajar, hacer compras y comer en restaurantes al aumentar el contagio. El martes se reportaron más de 4.300 decesos, otro récord. Los cierres de restaurantes, bares y otros locales donde se congrega la gente en California, Nueva York y otros estados probablemente han incrementado las cifras de despidos.
Algunos estados y municipios se resisten a las cuarentenas, en parte por temor a las consecuencias económicas, pero con ello elevan el riesgo del contagio. Minnesota autorizó esta semana la admisión de personas en los restaurantes, y Michigan se apresta a hacer lo mismo. Algunos bares y restaurantes en Kansas City han ampliado el horario de atención.
Además de las solicitudes de prestaciones por primera vez la semana pasada, el gobierno dijo el jueves que 5,3 millones de personas siguen recibiendo las prestaciones estatales, comparado con 5,1 millones la semana pasada.
Actualidad Laboral / Con información de AP
