10-05-2018

BT, el mayor grupo de telecomunicaciones británico, va a recortar 13.000 puestos directivos y administrativos y dejará su sede de Londres; en el que es el último intento para regenerarse, tras un escándalo contable y el declive de su negocio.


El consejero delegado, Gavin Patterson, ha querido mantener a los inversores de su lado manteniendo el dividendo y acordando un nuevo plan de financiación de pensiones, para inspirar confianza sobre las perspectivas a largo plazo. Patterson dijo que esta reestructuración, que se produce tras un duro 2017, se concentrará en servicios esenciales para consumidores y empresas.


BT contratará a unos 6.000 nuevos ingenieros y personal de atención al cliente para apoyar el despliegue de redes de fibra, y de telefonía móvil de última generación (5G).


El anuncio coincide con la publicación de los resultados del grupo en el cuarto trimestre fiscal, que arrojaron una caída del 3% en los ingresos, con una cifra de 5.967 millones de libras, justo por debajo de las expectativas de los analistas.


Actualidad Laboral / Con información de Reuters