Representantes de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores del Estado Miranda, respaldan la instalación de un sistema de máquinas captahuellas en los establecimientos dedicados a la venta de productos de primera necesidad, como medida para hacer frente al contrabando de estos productos. Consideran que es viable y que contribuirá al bienestar de las clases más necesitadas.

“Esto lo que va a llevar es a restaurar de nuevo todo lo que es el mercado de alimentos y va a llevar de nuevo a que esté abastecido el mercado”, dijo Frank Quijada, vicepresidente de esta central y presidente del sindicato de Empresas Polar.

Quijada expresó que esta central de trabajadores contribuirá con el Ejecutivo Nacional en la aplicación de esta medida. “Quienes sufrimos más de eso somos los trabajadores, los trabajadores que estamos metidos en una empresa ocho horas, los trabajadores que no podemos salir a hacer compras, entonces estamos metidos en la empresa y cuando salimos ya se lo han llevado todo”, afirmó el representante sindical.

Alexis Corredor, coordinador de la Central Socialista Bolivariana de Trabajadores del Estado Miranda, dijo que están analizando cómo contribuir a incrementar la producción en las empresas de la entidad para que sus artículos lleguen a los anaqueles de las distintas cadenas comerciales del país.

Corredor expresó que han planteado a las empresas en las que están discutiendo contratos colectivos, que esta central de trabajadores está en disposición de presentar al Gobierno Nacional información sobre sus requerimientos de divisas y una solicitud para agilizar su liquidación, siempre y cuando se les demuestre que las compañías han cumplido con los requisitos establecidos. “Nosotros estamos dispuestos a solidarizarnos en primer lugar con la necesidad de que ellos obtengan las divisas que requirieran, sólo si se garantiza que los informes financieros se correspondan con la realidad”, dijo.

Los representantes de esta organización sindical también aseguraron que defienden lo establecido en la normativa vigente en materia laboral, pero no avalan los incumplimientos de los trabajadores con sus obligaciones. “Sindicalmente nosotros no podemos estar avalando una estafa, desde el punto de vista, si un trabajador o una trabajadora altera informes médicos o incurre en cuestiones que desde nuestro punto de vista ético, contravienen lo que es la moral de la clase trabajadora, nosotros no respaldamos y tenemos muchas pruebas de eso”, afirmó Corredor.

El coordinador de esta central dijo que en caso de incumplimientos por parte de los trabajadores, esta organización busca la solución pacífica del conflicto. “Si es la calificación de despido que la empresa lo demuestre ante el organismo competente y una vez demostrado con los alegatos que legalmente tenga la empresa, si el sindicato considera que la empresa indudablemente tiene razón en eso, nosotros no podemos respaldar acciones como esa porque eso va en contra de la misma eficiencia del resto de los compañeros y se nos califica globalmente de que tendemos a contribuir a la flojera, contribuimos a alterar informes, cosa que no es así”, destacó.

José Ramírez, vicepresidente de la Federación Bolivariana Socialista de Trabajadores de la Ciudad, el Campo y la Pesca del Estado Miranda, se refirió a las calificaciones de despido emitidas por las inspectorías de la entidad. “En cuatro inspectorías, estamos hablando aproximadamente de entre 65 y 70 calificaciones de falta a trabajadores que realmente están pasando esta situación.

Este jueves se inició la segunda fase del congreso de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores del Estado Miranda. En nueve mesas de trabajo se analizarán diversos temas relacionados con el sector sindical, con su contribución al incremento de la producción nacional y con su participación en el proceso político que se adelanta desde el sector oficial. Las deliberaciones se extenderán hasta el viernes en horas de la tarde.

Actualidad Laboral/Jessica Morales