Dos meses después de que Elon Musk declarara su intención de adquirir Twitter en un acuerdo de 44.000 millones de dólares (unos 41.000 millones de euros entonces; prácticamente la misma cantidad en euros según el cambio actual), el multimillonario habló directamente con los empleados de Twitter. Nada de lo que dijo pareció tranquilizarlos y, desde entonces, oleadas de empleados de Twitter han abandonado la empresa.
En esa reunión virtual de junio, Musk habló con los empleados de Twitter sobre temas que iban desde los extraterrestres hasta los despidos necesarios para garantizar la salud de la empresa. Los trabajadores ya habían expresado su frustración y decepción por el acuerdo alcanzado en abril. En las 3 semanas posteriores, Twitter vio cómo unas 100 personas abandonaban la compañía, según 2 personas con conocimiento de las operaciones y de la tasa de deserción de la empresa.
Esta tendencia de aumento de la deserción ha continuado cuando Musk y Twitter han entrado en una saga legal en curso después de que Musk dijera que ya no quería comprar Twitter.
A finales de septiembre, la compañía ha visto una pérdida neta de más de 700 trabajadores a tiempo completo en todo el mundo, comparten dichas personas, que piden no ser identificadas por tratarse de asuntos de la empresa. Muchos trabajadores han mencionado a Musk y la "inestabilidad" que rodea a la adquisición como razón para irse, añade una de ellas.
Un portavoz de Twitter ha declarado que la empresa esperaba un mayor nivel de bajas incluso antes de que se produjera el acuerdo con Musk y que los factores macroeconómicos han afectado a la contratación y la retención.
En febrero, Twitter informó de que contaba con una plantilla de unas 7.500 personas. La empresa siguió contratando durante la primera mitad del año, hasta llegar a unas 8.200 personas en junio, según las personas familiarizadas con el tema. Ahora ha perdido aproximadamente la cantidad de empleados que contrató este año, y su plantilla se ha reducido un 9% en términos netos.
"Estamos empezando a notarlo", destaca una persona empleada por la compañía en la actualidad, en referencia al impacto de la deserción en los equipos individuales. Algunos equipos han perdido hasta un tercio de su plantilla, añade.
El desgaste ha sido tan alto que Twitter lo menciona en los procedimientos judiciales como uno de los efectos perjudiciales del intento de Musk de retirarse del acuerdo. Ha aumentado aún más desde principios de agosto, cuando las unidades de acciones restringidas de muchos trabajadores se consolidaron por completo, lo que significa que podían cobrar sus acciones, señalan las fuentes citadas
Entre finales de julio y la segunda semana de agosto, unas 300 personas abandonaron la empresa en términos netos, y otras 200 lo han hecho desde entonces.
Twitter impuso una amplia ralentización de la contratación en mayo y despidió a decenas de personas en julio, pero ha contratado a unos 280 empleados desde junio, según Linkedin. Aunque la compañía preveía que algunas personas siguieran renunciando voluntariamente este año, e incluso cambió la forma de categorizar por qué la gente dejaba la empresa para reflejar el impacto de Musk, la dirección no esperaba que se fuera tanta gente, analiza una de las personas citadas.
Ahora, se habla internamente de un nuevo enfoque en la cobertura de puestos, incluso mientras se mantiene oficialmente la desaceleración de la contratación, comparte un empleado. En la última semana, Twitter ha publicado decenas de puestos vacantes en LinkedIn, desde estrategas de marca hasta directores de ingeniería o expertos en privacidad.
Sin embargo, los empleados han contado a Business Insider que reciben correos electrónicos y notas de "último día" varias veces a la semana de compañeros que dejan la empresa.
"La moral general es muy baja", declara a Business Insider un trabajador que ha dejado Twitter recientemente: "Pero seguro, la gente empezó a irse por culpa de Elon", afirma.
Actualidad Laboral / Con información de Business Insider