Les preguntamos constantemente a los niños: ¿qué quieres ser cuando seas grande? Policía, abogada, enfermero, maestra, veterinaria y otras muchas profesiones son nombradas por ellos sin conciencia de que, años más tarde, deberán responder a la interrogante con la mayor certeza posible. La profesión es uno de los compromisos más importantes que hacemos. Consume tiempo, energía, nos da y nos quita. Es una relación, muchas veces, para toda la vida.
¿Qué debemos preguntarnos al determinar el camino elegir? Jaime Núñez, presidente de UBOSS, empresa dedicada a los recursos humanos y la administración de beneficios, indica que lo principal es identificar tus intereses y cómo estos parean con tus talentos.
“Usualmente, lo que te gusta es aquello en lo que tienes talento. Te sale fácil o la has cultivado desde siempre”, explica el también conferenciante de seminariosimagen.com.
Las señales de la vocación se manifiestan de muchas maneras que a veces dejamos pasar por alto. No consideramos la importancia de algunas virtudes que poseemos y que podrían ser muy valiosas para el desempeño profesional. Y no hablamos de simplemente ser bueno con los números o las letras. Varios rasgos de la personalidad -como trabajar en equipo o ser líder- son bien cotizadas en el mundo laboral.
Un aspecto importante y muchas veces ignorado al decidir qué quieres estudiar es bajo cuáles condiciones deseas trabajar. Cosas tan sencillas como tu manera de vestir, si disfrutas de interactuar con los demás o tener la libertad de decidir tu horario pueden darte claves importantes.
“Quizás las nuevas generaciones le dan más peso a estos factores. De hecho, ellos no viven para trabajar sino que trabajan para vivir. No es como antes, que las personas se centraban más en cuánto dinero podían ganar, aunque pasaran 30 años en u n trabajo que no les gustaba”, indica Núñez.
La búsqueda de oportunidades laborales no debe pasar por alto la variedad de opciones de oficios cuya demanda se perfila en aumento, sobre todo en el área de la salud y la tecnología.
“Todo lo relacionado al cuido de envejecientes será una de las industrias más grandes en los próximos años, así como la seguridad. Y si hemos visto un salto bien grande en las profesiones relacionadas a la tecnología, debemos estar preparados para uno mayor en los próximos diez años”, asegura Núñez.
Aunque algunos descartan elegir un oficio por asumir que el salario estará por debajo de sus expectativas, la realidad puede ser muy distinta. Aquellos que se saben elegir el área de trabajo que les apasiona tendrán muchas más posibilidades de triunfar y sobresalir, sencillamente porque disfrutan lo que hacen.
“Cuando tienes vocación, vas a llegar a ser el mejor en eso. Pero si no sientes pasión por lo que haces, puedes ir a la mejor universidad, tener las mejores notas, y a la hora de ejecutar otros te superarán”, comenta.
Para determinar la carrera o tener por obligación que buscar nuevas oportunidades laborales puedes tomar alguna de las diversas pruebas de intereses que existen en el mercado, consultar a un consejero vocacional o a un coach vocacional.
Actualidad Laboral / Con información de El Nuevo Día