Con la vuelta a la rutina, es habitual que empiece a acumularse trabajo, lo que puede derivar en que muchos/as profesionales sientan sobrecarga de trabajo. Se trata de un problema creciente en muchas organizaciones, que afecta a su bienestar y productividad.

Desde El Salario Emocional aseguran que esta situación puede generar estrés y ansiedad, disminución del rendimiento y una notable baja en la motivación. Por ello, es fundamental que las empresas sean capaces de identificar los síntomas y lancen medidas, para gestionar la sobrecarga laboral; con el objetivo de asegurar el bienestar, compromiso y productividad. Esto ayudará a evitar que los síntomas deriven en el síndrome del trabajador quemado o burnout.

Principales síntomas de la sobrecarga de trabajo

- Fatiga constante.
- Agotamiento físico y mental.
- Estrés crónico.
- Dolencias físicas (dolor de cabeza, bajada de defensas, problemas intestinales).
- Trastornos del sueño.
- Disminución de la productividad y calidad del trabajo.
- Desmotivación y frustración.
- Apatía.
- Irritabilidad y cambios de humor.
- Problemas de concentración.

Estrategias para combatirla

Para hacer frente a esta problemática con éxito, es crucial que las compañías asuman un rol activo en la prevención y gestión de la sobrecarga laboral. Por ejemplo:

- Fomentar la conciliación entre la vida personal y profesional (flexibilidad, teletrabajo).
- Aportar formación y herramientas en la gestión del tiempo, y en la priorización de tareas.
- Asegurar la redistribución de tareas y si es necesario, la contratación de nuevo talento.
- Mejorar la organización y capacitar a los líderes para una correcta gestión de equipo.
- Automatizar aquellas tareas que sean de menor valor añadido.
- Promover las pausas activas, los descansos y la desconexión digital.
- Ofrecer apoyo emocional (sesiones de mindfulness o terapia).
- Crear un ambiente de trabajo colaborativo y sano (acciones de teambuilding).

La sobrecarga de trabajo es un desafío que afecta tanto a los empleados/as como la empresa, y que es fundamental abordar a tiempo para evitar consecuencias para el negocio. Las organizaciones deben estar atentas a los síntomas de sobrecarga del equipo, y tomar las medidas necesarias para evitarla. Esto permitirá mejorar el bienestar de los trabajadores/as y aumentar su productividad.

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